lunes, noviembre 02, 2009

TRAICIÓN SIN LIMITE

Confieso que tengo una relación extraña con esta película de Walter Hill... Quiero que me guste, pero nunca termina de gustarme tanto como deseo.

"Traición sin límite" es una historia a la que le falta un par de hervores. Las diferentes lineas argumentales no terminan de cuajar por si mismas ni tampoco ensamblarse en un tono armónico y coherente. Estoy convencido de que, forzado por circunstancias económicas y buscando la viabilidad del proyecto, alguien cortó secuencias con las mismas desconsideradas tijeras de siempre.

Y el resultado es el mismo de siempre cuando se corta y recorta sin consideración... Los personajes no terminan de respirar y las tramas carecen del suficiente espacio narrativo como para desarrollarse mientras el que les escribe siempre intuye la gran historia de violencia, amor y odio que pudo ser. Esos dos amigos separados por la frontera física del Río Grande y por la espiritual que separa lo correcto de lo incorrecto, aunque unidos por el amor a una misma mujer, merecían una historia mejor, más espacio y más tiempo para emocionarnos en su lucha contra un destino que está escrito para los dos.

La realidad es diferente.

La narración resulta deslabazada y episódica. Hay demasiados personajes con cosas qué decir, demasiadas situaciones que se suceden.

Todo resulta igual de importante y exige su lugar en una historia que fácilmente debe durar treinta o cuarenta minutos más.

Desigual y entretenida por momentos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario