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Boltzmann y la IA: cuando el sentido es una propiedad de segundo orden

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Del orden termodinámico a la coherencia lingüística: la misma ley de emergencia de escala operando en dos mundos distintos Boltzmann descubrió que la estabilidad del universo no es fundamental, sino emergente: un efecto de escala nacido del caos microscópico. Hoy vemos el mismo patrón en la IA: miles de decisiones estocásticas producen coherencia lingüística sin que ningún token la posea por sí mismo. Este artículo explica por qué el sentido es una propiedad de segundo orden, en la materia y en las máquinas. Ludwig Boltzmann murió convencido de que lo habían tratado como a un apestado. Lo que destruyó a Boltzmann no fue la estadística, sino la incapacidad humana de aceptar que el mundo funciona sin darnos certezas . En la Viena de finales del XIX, el determinismo era una creencia moral: el universo debía ser un mecanismo perfecto. Boltzmann sostenía lo contrario: la estabilidad que vemos no está en el origen del mundo, sino en su escala . Veía l...

El sistema de “crédito social” en China: qué es y qué no es

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Una explicación factual de cómo funciona realmente el Sistema de Crédito Social y por qué la narrativa distópica occidental no coincide con la evidencia El Sistema de Crédito Social chino ha sido convertido en Occidente en una distopía tecnológica: puntuaciones morales, vigilancia total y castigos automáticos por mala conducta. Nada de eso aparece en la documentación oficial ni en el funcionamiento real del SCS. Este artículo desmonta mitos, explica la arquitectura administrativa del sistema y señala los riesgos que sí existen: opacidad, automatización punitiva y falta de garantías El llamado sistema de crédito social chino suele presentarse en Occidente como una maquinaria distópica que puntúa moralmente a los ciudadanos y determina su destino social. Esa imagen no coincide con la realidad documentada por la investigación académica y regulatoria de los últimos años. Entender el SCS exige separar hechos, exageraciones y riesgos reales. 1. Ori...

Serie Krátos: Por qué las minorías mandan (I)

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Cómo y por qué las mayorías nunca han mandado, ni siquiera en democracia. La teoría política, la antropología y la historia comparada convergen en la misma conclusión: el poder es estructuralmente minoritario. Allí donde hay organización, información estratégica y control de recursos, surge una élite. Esta entrega traza la continuidad de ese patrón desde las sociedades acéfalas hasta la tecnocracia digital. ENTREGA I — Genealogía del Poder: Por Qué las Minorías Mandan (Serie Krátos — La historia del poder minoritario y del miedo al poder de la mayoría) Introducción: de la presentación a la demostración En la Presentación de la serie Krátos, planteamos una premisa clara, casi obvia cuando se observa la historia sin mitos: el poder efectivo nunca ha sido de la mayoría. Todas las sociedades humanas —sin excepción conocida— han sido gobernadas por minorías organizadas, mientras las mayorías han quedado relegadas a la fuerza de trabajo, la obe...

Serie Krátos: el poder que nunca fue del pueblo (0)

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Cómo y por qué la democracia integra a las masas sin entregarles el mando Decimos que vivimos en democracia como si eso significara que la mayoría manda. Pero el poder —el que obliga, redistribuye y altera el orden— sigue en manos de minorías organizadas. Esta entrega inicial, que presenta la serie, recorre el hilo que va de Aristóteles al proletariado y al poder judicial para mostrar algo incómodo: las masas participan, pero casi nunca mandan. ENTREGA 0 — Presentación: El poder es siempre de minorías Decimos “democracia” como si fuera sinónimo de gobierno del pueblo. Pero la historia política, desde la Antigüedad hasta hoy, muestra otra realidad: el poder siempre ha sido ejercido por minorías organizadas sobre mayorías dispersas. No por maldad, sino por estructura. Quien controla la coerción, la organización y los recursos estratégicos controla el poder. Y ese control rara vez está en manos de la mayoría. El p...

Cuando la IA deje de ser estocástica

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La próxima generación será neuro-simbólica y verificable La estocasticidad no es el destino de la inteligencia artificial: es una etapa intermedia. Lo que viene no es una IA que improvisa con patrones, sino una que demuestra lo que afirma. En esta transición, la metamatemática deja de ser teoría y se convierte en arquitectura. La discusión pública sobre la inteligencia artificial se mueve en círculos. Repite que los modelos actuales “predicen palabras”, que funcionan por correlaciones y que eso será siempre así. Pero la estocasticidad no tiene por qué ser el núcleo: puede quedar confinada a un papel secundario dentro de arquitecturas más rigurosas. El futuro de la IA quizá no sea una máquina que produce frases plausibles, sino sistemas híbridos capaces de demostrar que lo que dicen es cierto. La transición ya ha empezado, al menos en algunos dominios. 1. La estocasticidad no es un fallo: es una limitación matemá...

Perder Pokrovsk es perder el Donbass

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El colapso operativo de Pokrovsk significa que Ucrania ya no puede dirigir la guerra desde la región: sin su columna vertebral logística, el Donbass entero queda indefendible. Perder Pokrovsk no es perder una ciudad: es perder la capacidad de defender un territorio entero. El Donbass resistía porque Pokrovsk lo alimentaba. Al desaparecer ese soporte, el Donbass deja de existir como frente operativo. Jaque mate. La inminente caída de Pokrovsk no es un episodio táctico más. Es el momento en que Ucrania empieza a perder la capacidad de dirigir la guerra desde dentro del Donbass, aunque aún pueda seguir combatiendo allí. Es el punto donde el sistema que permitió resistir durante diez años comienza a colapsar de forma irreversible. La prensa lo presenta como “una ciudad bajo presión”. Pero Pokrovsk no es una ciudad: es un órgano vital de la guerra, y su destrucción anuncia un cambio de fase. 1. Pokrovsk es la colum...

Ucrania y la corrupción: la continuidad que nadie quiere ver

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Treinta años de redes oligárquicas, capturas institucionales y purgas cosméticas desmienten la idea de que la guerra cambió algo esencial en el sistema político ucraniano. Las recientes detenciones de viceministros y empresarios próximos al poder —rematadas por la dimisión del jefe de gabinete de Zelenski tras una investigación por corrupción— han sido presentadas como señales de una Ucrania “que por fin combate a los corruptos”. Pero la historia cuenta otra cosa. Nada de esto es nuevo: desde los años noventa, informes de la Comisión Europea, Transparency International y el Banco Mundial describen un Estado diseñado para ser capturado. La guerra no ha limpiado el sistema; solo ha elevado los incentivos para explotarlo bajo nuevas formas. Fingir sorpresa no es análisis: es propaganda. (Con referencias a Transparency International, Comisión Europea, NABU, SAPO, HACC, Reuters, Ukrainska Pravda y Tribunal de Cuentas Europeo) ...