Tenía razón Cela.
El que resiste vence.
Y Mariano Rajoy es otro buen ejemplo del grado de verdad de semejante aforismo. Porque si algo queda claro del debate sostenido anoche entre los dos aspirantes de la silla eléctrica de la Moncloa es que los dos, de una manera u otra, han coincidido en su pronóstico acerca del ganador. Y por fin, el señor Rajoy conseguirá el puesto para el que tanto y con tanto esfuerzo ha opositado.
He tenido que venir una de las peores crisis de la historia de España y ha tenido que pasar uno de los peores presidentes de la joven historia de la democracia española... tampoco hay tantos. Pero Rajoy ha aguantado hasta prácticamente quedar únicamente él, como única opción posible/viable, para este erial en crisis llamado España.
Sin dar la cara demasiado, ni siquiera lo justo, la victoria será su premio.
Y las cosas volverán a su cauce, al 10 de Marzo, cuando todo estaba preparado para que heredase la tierra que le había prometido José María Aznar
Lo que debió ser, por fin es.
Esperemos que no lo haya dado todo en este esfuerzo de 8 años por conseguir aquello que le fue arrebatado de las manos.