miércoles, julio 06, 2005

LA GUERRA DE LOS MUNDOS

1
Definitivamente, algo debe pasar en la vida privada de Spielberg. Algo grave que le obliga a volcarse en el trabajo.

Estos son los proyectos que tiene en marcha como productor ejecutivo segun la Internet Movie Database (www.imdb.com)

- The Talisman (2005) (in production) (executive producer)
- Untitled Ukrainian Holocaust Project (2007) (announced) (executive producer)
- "The Pacific War" (2006) (mini) TV Series (announced) (executive producer)
- Untitled Steven Spielberg/Abraham Lincoln Project (2007) (pre-production) (producer)
- Untitled Transformers Film (2006) (pre-production) (executive producer)
- Jurassic Park IV (2006) (pre-production) (executive producer)
- Flags of Our Fathers (2006) (pre-production) (producer)
- Untitled 1972 Munich Olympics Project (2005) (filming) (producer)
- Memoirs of a Geisha (2005) (post-production) (executive producer)
- The Legend of Zorro (2005) (post-production) (executive producer)
- Monster House (2006) (post-production) (executive producer)

Y como director, tras la película que nos ocupa, Spielberg tiene hipotecado su futuro hasta el año 2007:

- Indiana Jones 4 (2006) (announced)
- Untitled Steven Spielberg/Abraham Lincoln Project (2007) (pre-production)
- Untitled 1972 Munich Olympics Project (2005) (filming)

Semejante voracidad me da que pensar...

2
En cuanto a "La guerra de los mundos", pocas objeciones se pueden hacer al producto desde un punto de vista cinematográfico: está bien de ritmo, está bien rodada y bien contada (cualidades muy características de Spielberg), buenos efectos especiales, la estrella de la película se gana su sueldo.... Pocas o ninguna objeción, pero la verdad es que la película no termina de traspasar, de cuajar.
Quizá resulta demasiado fría.
La buena obra de un maestro cansado.

3
La novela de H.G. Wells en que se basa tampoco es que se encuentre entre las mejores de su autor (para mi gusto, "La máquina del tiempo" o "El Hombre invisible" son mucho mejores).
Su único mérito es haber servido de pasto para el talento de un genio como Orson Welles y quizá ni siquiera éso. Porque el efecto tan arrollador que tuvo la emisión radiofónica del Mercury Theater de Welles sobre la población norteamericana fue sobre todo una casualidad.
Los americanos escuchaban en su mayoría un programa de humor y variedades. Creo que era el programa de Charli McCarthy o algo así. No estoy seguro. No me hagan mucho caso en el dato. Cuando este programa emitió una interpretación musical, la audiencia en masa se lanzó a "zapear"en busca de más humor encontrando en las ondas el momento justo en que un periodista retransmitía un encuentro en la tercera fase con una nave alienígena.
Lo demás ya pertenece a la historia de la psicología de las masas.

En cualquier caso, y por esta razón "La Guerra de los mundos" quizá ocupe un lugar dentro de la memoria colectiva norteamericana que, en mi opinión, en absoluto se corresponde a sus valores literarios.
Y quizá por eso mismo un joven americano como Spielberg puede sentirse atraído por esta historia que, en su momento, me resultó de aburrida lectura.

4
De todos modos, estoy convencido de que Spielberg sería capaz de hacer una película correcta con la guía telefónica de Los Angeles... porque éso es lo que ha hecho con "La guerra de los mundos" de Wells.

5
Aún así, veo cosas.

Cada vez estoy peor.

Mientras veía la película, no podía evitar pensarla como una especie de versión oscura de "Encuentros en la tercera fase".
En ciertos aspectos, el personaje que interpreta Cruise se asemeja al personaje que encarnaba Richard Dreyfuss: una especie de niño grande, inadaptado y perdido en un mundo de mayores que se comportan como tales.
Pero las cosas han cambiado. El destino que le reserva Spielberg, su creador, es diferente.
Ya no es el triunfo. Conseguir ser el elegido para viajar a otros mundos de la mano de aquellos seres que transmitían inteligencia y bondad.
Ahora aparece el fracaso.
El destino es triste: quedar fuera del hogar al modo del Ethan Edwards (John Wayne) de "Centauros del desierto".
La soledad como dudosa de recompensa.

Además, la imagen de los extraterrestres invasores es diametralmente opuesta a la de los extraterrestres visitantes de la película de 1978.
Donde antes había luz, sonrisas y gestos de buena voluntad, ahora hay oscuridad, sangre, gruñidos y muerte.

Por esó creo que algo pasa en la vida de Spielberg. Quizá, los 30 años que separan ambas películas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario