"Mill, que siguió siendo un ardiente defensor de la economía de mercado, no dejó por ello de reconocer que el sistema económico no puede abandonarse totalmente el arbitrio de sus propias fuerzas. Es decir, al ciego determinismo de unas supuestas leyes naturales. Adam Smith interpretó que la libertad de iniciativa privada no es contraria al bien común, porque existe una mano invisible, una mano impersonal, que impone una armonización entre los intereses particulares y el general. Mill empezó a tomar conciencia de que el ejercicio de la libertad no es irresponsable, y que el hombre debe emplear sus facultades racionales en el intento de armonizar sus intereses particulares con los de la sociedad. Cada vez era más evidente que no existe fuerza natural que libere al hombre de la libertad de sus decisiones."
(Evolución del pensamiento económico, Miguel A. Martínez-Echevarría)
La libertad no es sólo un derecho sino un derecho que debe ejercerse con responsabilidad. No es gratuita sino que debe obedecer a alguna razón.
La libertad no es un valor en sí mismo, siempre se es libre para hacer o sentir "algo".
La libertad es el medio de los medios. La absoluta capacidad de poder dentro de los términos de la propia razón.
Siempre se es libre para algo.
Y tener una libertad que no se usa es lo mismo que no tener nada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario