DESENTERRAR EL SOL
El colectivo de teatro social "Los últimos" inauguraba refugio en las mil y una calles del madrileño barrio de Usera y presentaba también un nuevo espectáculo, "Desenterrar el sol", con la prostitución en el punto de mira.
Me gustó mucho su apuesta por la voz y la danza para expresar tensiones que tienen que ver con algo tan físico como el propio cuerpo que es lo que se compra y vende en esta clase de transacciones.. Con la danza el cuerpo llega a lugares que la voz no alcanza y expresa directamente mensajes más directos y totales, menos racionales y más emocionales.
Una buena idea desarrollada con acierto.
Por otro lado, también encontré muy interesante el énfasis que el espectáculo pone en el endeudamiento como causa principal de la situación de explotación que viven esas mujeres convirtiendo la prostitución en una especie de metáfora de los modos y maneras mediante los que el sistema se apodera de las personas y las convierte en piezas funcionales de su maquinaria.
La ballena blanca de las deudas es la que nunca puede ser satisfecha del todo.
Buen espectáculo que demuestra que los medios no son tan importantes cuando hay ideas y verdad de por medio.