lunes, abril 06, 2009
domingo, abril 05, 2009
Trainspotting
sábado, marzo 28, 2009
Gabriel García Márquez
(Aracata, Colombia 1928—)
Ojos de perro azul
(1950)
Entonces me miró. Yo creía que me miraba por primera vez. Pero luego, cuando dio la vuelta por detrás del velador y yo seguía sintiendo sobre el hombro, a mis espaldas, su resbaladiza y oleosa mirada, comprendí que era yo quien la miraba por primera vez. Encendí un cigarrillo. Tragué el humo áspero y fuerte, antes de hacer girar el asiento, equilibrándolo sobre una de las patas posteriores. Después de eso la vi ahí, como había estado todas las noches, parada junto al velador, mirándome. Durante breves minutos estuvimos haciendo nada más que eso: mirarnos. Yo mirándola desde el asiento, haciendo equilibrio en una de sus patas posteriores. Ella de pie, con una mano larga y quieta sobre el velador, mirándome. Le veía los párpados iluminados como todas las noches. Fue entonces cuando recordé lo de siempre, cuando le dije: «Ojos de perro azul». Ella me dijo, sin retirar la mano del velador: «Eso. Ya no lo olvidaremos nunca». Salió de la órbita suspirando: «Ojos de perro azul. He escrito eso por todas partes».
viernes, marzo 27, 2009
martes, marzo 24, 2009
lunes, marzo 23, 2009
Marca las distancias.
No quiere que su mirada llegue demasiado lejos.
Nunca más allá de la piel... por el momento.
Le asusta que esos ojos vayan demasiado adentro,
allá donde anidan las detenidas presencias delatoras
de viejos reflejos de otros tiempos,
cuando otros soles brillaban incandescentes
en la quieta clepsidra de un mediodía eterno.