sábado, mayo 15, 2010

TOM WAITS

EDDIE IZZARD

Brit vs. US movies...

"Y es que acabó el partido y, que cosas, medio estadio se echó a llorar y el otro medio puso cara de circunstancias de flemático perdedor hermético. Los que se echaron a llorar, naturalmente, fueron los que ganaron, confirmando una vez más que esto del Atleti es distinto a todo. Porque el pitido final coincidió con un llanto general, un llanto precioso y alegre y profundo, con abrazos largos y ojos llorosos, con miradas al cielo, solos todos entre la grada repleta, recordando a los que se habrían alegrado tantísimo en ese momento pero ya no están y a los que, por haberse quedado en Madrid, no estaban allí para llorar con el resto. Los numerosos aficionados del Hamburgo que poblaban las gradas miraban atónitos a una masa que había pasado el día cantando y bailando y, ahora que había conseguido aquello que venía a celebrar, se echaba a llorar desconsolada. Lloró la afición de alegría, que no es algo de lo que pueda presumir mucha gente, y el llanto se llevó los recuerdos de Lyon, de Bruselas, de Sevilla, Zaragoza y Valencia."
(Crónica del día que nos merecíamos, El rojo y el blanco)

Maravilloso...
SUEÑO EN FUGA


LINEALIDAD VS. NO LINEALIDAD












I
"Las ecuaciones diferenciales lineales, y los sistemas que describen, se han estudiado desde que Newton inventó el cálculo y hoy en día se comprenden tan bien que existen procedimientos bien definidos y relativamente simples para solucionarlos. El comportamiento de estos sistemas lineales es previsible; normalmente se pueden analizar en partes más simples, y comprender un tipo de solución que ayuda al matemático a considerar otros tipos. Los sistemas lineales son graduales y moderados; su comportamiento refinado y regular se encuentra en ríos que fluyen lentamente, circuitos eléctricos que funcionan bajo condiciones normales, productos químicos que reaccionan lentamente, pequeñas vibraciones, motores que funcionan a baja potencia, sonidos silenciosos y estructuras sencillas.
Pero una vez que se aumenta el poder o violencia de un sistema, sale de la región familiar y entra en el mundo más complejo de los efectos no lineales: los ríos se vuelven turbulentos, los amplificadores se sobrecargan y distorsionan, los productos químicos explotan, las máquinas sufren oscilaciones incontrolables, las placas se doblan, los metales se fracturan y las estructuras se derrumban. No obstante, en algunos casos, estos efectos no lineales pueden no ser destructivos sino implicar formas originales de comportamiento y el surgimiento de nuevas formas de estructura.
Una barra metálica que se carga con pesas responde linealmente en un primer momento. Cada vez que se añade una pequeña pesa, la barra se dobla en la proporción correspondiente; pequeñas cargas producen pequeños efectos y un gráfico que relacione cuánto se doble la barra con la carga aplicada, resulta lineal y previsible. Pero supongamos que esta carga alcanza un punto crítico; de repente la curva ya no se relaciona solamente con la carga, y la barra se deforma o se fractura. En esta fase no lineal, o «la última gota que hace colmar el vaso», una pequeña causa produce un efecto drástico y el gráfico de lo que se dobla tiene, en comparación con la carga, una discontinuidad inesperada y repentina.
Pisar el acelerador de un coche da como resultado un aumento suave de velocidad. Al principio, este aumento está en la región lineal y todo es regular y previsible. Sin embargo, cuando el coche alcanza una determinada producción de fuerza crítica, los efectos no lineales se vuelven importantes. Una pequeña pisada adicional del acelerador puede provocar que el coche vibre violentamente o que el motor se caliente y se cale. Del mismo modo, un pequeño giro del control de volumen de un equipo estereofónico produce una reacción lineal de los altavoces, pero si se sube demasiado el volumen las no linealidades en los circuitos electrónicos producen una marcada distorsión.
La naturaleza es rica en ejemplos de comportamiento no lineal. De hecho, resulta que la no linealidad es la regla y no la excepción; el mundo se debe describir matemáticamente con ecuaciones que exhiban puntos críticos y órdenes nuevos de comportamiento y no siempre se puede analizar o descomponer en formas más simples. Entonces, ¿por qué los conceptos de la linealidad y previsibilidad han tenido una posición tan destacada en la ciencia? La respuesta es simple: hasta el advenimiento de ordenadores de alta velocidad y el desarrollo de técnicas matemáticas nuevas, las ecuaciones diferenciales no lineales eran como un libro cerrado. Sin embargo, sus complementos lineales se podían solucionar de un modo claro. Correspondían a simples leyes físicas y al análisis de sistemas complejos en elementos más simples que actuaban recíprocamente.
Por esta razón, hasta hace una década aproximadamente, la mayoría de los científicos tendían a concentrarse en el campo lineal de los sistemas y, hasta cierto punto, ignorar otros comportamientos. Al estudiar el paso del agua a través de un conducto estrecho o la relación de un avión con el aire, la región no lineal se calificaba de «turbulencia» y sólo se trataban detalladamente unos pocos casos especiales. Pero hoy, gracias a los ordenadores más avanzados, es posible simular varias formas de turbulencia y utilizar nuevas formas de matemática para clasificar los distintos órdenes de solución. La riqueza del mundo no lineal es un descubrimiento relativamente reciente que sólo ahora se abre a los exploradores matemáticos. No obstante, la linealidad estimula una actitud mental tendiente a simplificar el análisis de los sistemas más complejos. Esto también es debido a que un sistema lineal siempre se puede analizar como una colección de ecuaciones diferenciales lineales emparejadas que corresponden a elementos que actúan recíprocamente".

II
"Esta consideración proporciona una razón a la tradición de ver la naturaleza en términos de análisis y a la interacción causal de entidades elementales. A condición de que la atención siempre se limite a sistemas que funcionan dentro de un campo lineal limitado, esta aproximación es válida. Pero en los casos más generales de caos, turbulencia, cambios de estado, transición y evolución, la naturaleza expone mecanismos mucho más sutiles en que se manifiestan propiedades nuevas y emergentes y las descripciones deben tener en cuenta el sistema total y no sólo sus partes.
Esta naturaleza no lineal es más parecida en su funcionamiento a un organismo que a una máquina. Por lo tanto, su comprensión requiere nuevas actitudes que estén más relacionadas con la sincronicidad que con la causalidad lineal, en las que patrones y órdenes surgen del fundamento general del cambio. Dentro de tal planteamiento, la mente ya no puede parecer materia extraña en un universo mecánico, sino que el funcionamiento de la mente tendrá resonancias con las transformaciones de la materia y, en efecto, se descubrirá que los dos surgen de una base más profunda."
(Sincronicidad, David Peat)

LA PORTUARIA & DAVID BYRNE

Hoy no temo a la muerte...


jueves, mayo 13, 2010

CAMPEONES!











No podía ser de otra forma... Una forma difícil, complicada y agónica... Casi en el último segundo... La completa y total locura.

miércoles, mayo 12, 2010

DAVID BYRNE & MARISA MONTE

Aguas de março


CONTROL

Las causas últimas que motivan las conductas casi siempre son un misterio... y el propósito de "Control" es mostrarnos uno de esos misterios, el de Ian Curtis, cantante y alma mater de Joy Division, grupo de referencia en la música británica de los 80.

Lo que más me gusta de "Control" es ese enfoque no participativo. La historia describe y en ningún momento se detiene a valorar, a modificar el espectáculo sombrío de la realidad de Curtis con conclusiones o valoraciones.

"Control" retrata el conjunto, lo bueno y lo malo, los pros y los contras y en este sentido tiene mucho que ver el hecho de que Anton Corbijn, su director, sea fotógrafo... porque "Control" retrata, busca profundidad mostrando superficie... Y las conclusiones, si llegan, suceden detrás de la mirada de cada espectador.

Yo, por mi parte y como siempre en estos casos, prefiero creer la leyenda.

Veo un Curtis reventado y reventando, víctima de su hipersensibilidad, sin poder procesar del todo las contradicciones de su propia vida, el daño que hace y el daño que recibe, en un insostenible equilibrio que le lleva a tener un pie en su vieja vida de trabajador casado y otro en su nueva vida de estrella musical, sin poder decidirse de una vez pero decidiendo constantemente en los detalles del día a día.

Explosiva volatilidad que encuentra terreno abonado para prender en su hipersensibilidad, que está justo en el centro de dos fuerzas que parten en direcciones opuestas buscando arrastrarle.

La personalidad convertida en un campo de batalla donde se acumulan las derrotas.

Pura vida.
HUELLA


CRISIS

domingo, mayo 09, 2010

Pier Paolo Passolini habla de la sociedad de consumo...



Hay algún pequeño error en la traducción al inglés, pero se entiende.
LEONARD COHEN

Chelsea Hotel...



Y llega un día extraño.

De pronto existe el tiempo.
Su desvanecida materia se concreta
y como por arte de inevitable magia
cuaja en asombroso peso,
una incómoda gravedad que se siente de forma súbita
al abrir y cerrar los ojos,
respirando,
contando las olas
o señalando las nubes con el dedo;
en todo caso vistiendo
los más modestos actos de la propia existencia
con un escaso y ceñido traje de apremio.
MUCHO FRIO


FRINGE

En esta segunda temporada resulta más que evidente.

J.J. Abrams, el creador de esta serie, ha encontrado un filón para sus historias en el campo de la física moderna. Ya resultaba patente en el modo de concebir la historia y algunas líneas narrativas de "Lost", su gran obra, y también se puso de manifiesto en su revisión juvenil de la saga Star Trek... Universos paralelos, idas y venidas en el tiempo, descomposición y fragmentación de la realidad y de las propias historias que suceden en ella.

Es interesante su planteamiento.

De algún modo en los relatos convencionales, la linealidad de la narración se empareja con la causalidad de forma que la aventura se convierte en un proceso lógico y racional en el que sucesivas causas producen efectos que, a su vez, se convierten en causas. Y este constante avanzar, casi cartesiano, debe llevar al héroe a la causa última de su aventura que se convierte en final.

La narración se adapta a las convenciones espacio-temporales de nuestro mundo euclidiano, el que perciben nuestros sentidos y cuya comprensión nos es suficiente para apropiarnos del mundo.

Hay un punto de vista, hay una historia y hay un sujeto-narrador que nos la narra.

El sentido es la propia historia y no hay sentido sin deducción, sin avanzar en las causas que se convierten en hitos/capítulos que componen la historia, pero también es la superficie misma sobre la que la historia se asienta y que la hace posible funcionando como kantiano a priori de la percepción.

Siempre hay un orden mecánico de convenciones que sustentan todas las historias, una suerte de estructura estable que soporta la creatividad de la narración permitiendo la tranquilidad en la percepción del público. Y ese orden siempre viene de la estabilidad de la mirada del sujeto que narra. Y siempre hay un narrador tras cada historia, un narrador que desde su posición de sujeto transmite un sentido no sólo en la propia historia, sino también a través de la propia historia.

La descripción que Newton hace del funcionamiento del mundo con su mecánica es la narración que funda la posibilidad del espacio euclidiano. Y del mismo modo que Newton nos narra el funcionamiento de nuestro mundo mediante la lógica científica de causas y efectos en cada narración que escuchamos no sólo hay la transmisión de una realidad sino la definición de una realidad sobre cuyo entramado se asienta la realidad narrada.

El texto siempre vehicula un propio contexto que lo hace posible.

Pero, y desde principios del siglo pasado, la física ha venido cuestionando la narración newtoniana del mundo. Tanto por arriba (relatividad) como por abajo (cuántica) es entorno estable sobre el que sucedían tranquilamente todas nuestras vidas, todas nuestras historias, se ha revelado mucho más tumultuoso, turbio y complejo.

Y de algún modo quiero intuir en obras como "Lost" la irrupción en el tranquilo y apacible mundo newtoniano de la narración de historias de esa otra realidad fragmentaria a cuya luz las certezas que hacen posible la estabilidad de una percepción o de una historia se revelan como puros actos de intención del propio sujeto y, en absoluto, realidades tranquilizadoras y objetivas.

El suspense se convierte en una parte constitutiva de la propia realidad, porque su estructura es volátil e inestable.

Y si en "Lost" el principal acento se pone en el modo en que afecta a los sujetos un entorno cuántico y fractal como la isla en donde el espacio y el tiempo no son realidades sobre las que uno pueda descansar con tranquilidad, en "Fringe" se incide en ese cuestionamiento de la realidad tal y como la percibimos convirtiendo los casos extraordinarios que la agente Dunham y su equipo investigan en puntos de fuga, abisales puertas abiertas a lo desconocido que, al mismo tiempo, son interrogantes que cuestionan los fundamentos de esa realidad.

En este sentido, entiendo que Abrams se haya decantado por una serie de este tipo. No obstante, creo que los resultados no están en el nivel de excelencia que exhibe "Lost".

En su segunda temporada "Fringe" continua amagando sin terminar de dar, especialmente en la línea narrativa de mundos paralelos que estructura la sucesión de capítulos (que es la que más me atrae) y ofreciendo además capítulos con tramas de contenido e interés desigual casi siempre resueltas de forma demasiado mecánica.

Entretenida como máximo... y por ahora.

Si no fuera por la gélida presencia de la agente Dunham...


sábado, mayo 08, 2010

"Un número incalculable de soldados ha muerto, de más o menos buen grado, no por su país, honor, religión u otro bien abstracto, sino porque sabían que si abandonaban su puesto y se salvaban a sí mismos, sus camaradas estarían expuestos a un mayor peligro"
(Guerreros, reflexiones del hombre en la batalla. J. Glenn Gray)
"Cada niño emprende el necesario proceso de desarrollo de su ego en la atmósfera psicológica creada por sus padres, parientes, tutores y otras fuentes importantes de amor y aprobación. La adaptación del ser humano a la sociedad requiere la creación de un ego -un «yo»- que sirva como principio organizador del desarrollo de la conciencia. De este modo, la creación de nuestra personalidad tiene lugar gracias a las influencias que recibimos del exterior, influencias que nos permiten identificamos con lo que nuestro entorno refuerza como «bueno» y reprimir lo que considera «equivocado», lo que es «malo».
El proceso de creación del ego es también, al mismo tiempo, el proceso de creación de la sombra. De este modo, el Yo enajenado es un subproducto natural del proceso de construcción del ego que termina convirtiéndose en una imagen especular opuesta a él ya que enajenamos aquello que no concuerda con la imagen que tenemos de nosotros mismos. La necesaria unilateralidad del proceso de desarrollo de nuestra personalidad va desterrando a nuestro psiquismo inconsciente aquellas cualidades inaceptables que negamos y rechazamos hasta que éstas terminan agrupándose y configurando una especie de personalidad inferior, una subpersonalidad, nuestra sombra personal."
(Encuentro con la sombra, Connie Downing y Jeremy Abrahams)

martes, mayo 04, 2010

















TREME

Uffff!

No pensaba escribir tan pronto sobre "Treme".

Ayer vi el primer episodio y las ideas, las emociones, todavía no han dejado de bailar en mi cabeza como humo de cigarrillo. Su caprichosa danza aún no ha cuajado en formas claras, inteligibles y, por lo tanto, susceptibles de ser encerradas en palabras. Pero la maravillosa sensación que sentí descubriendo las ruinas de Nueva Orleans, tomando contacto con los personajes, me lleva a pensar que esta serie merece mucho más que el anémico y desganado artículo que David Trueba ha dedicado a Treme en El País.

Seguramente aún no ha superado la pérdida de Ariadna Gil (y estoy seguro que echa de menos a la mujer, no a la actriz -si es que existe-), pero Treme no tiene la culpa...

Ha empezado con suavidad y calma, como empiezan todas las series de Simon y Mills. Encontrando a gente que llega, localizando a gente que está, moviéndose lentamente por las calles de una ciudad que se despereza, que se aleja de su desgracia con cada nuevo día que llega y pasa con pausadas y elegantes maneras de pantera.

Poco a poco se que iré introduciéndome en la vida de la ciudad, en las vidas de sus protagonistas y que conseguiré emocionarme. Porque tengo la impresión de que Treme nos va a hablar de vida, de voluntad de continuar adelante como si nada hubiera sucedido y de música, la maravillosa música de Nueva Orleans.

Si The wire es la constatación pesimista de una compleja realidad que mata la esperanza con su destructiva lógica de intereses creados, Treme va a ser la constatación esperanzada de otra realidad mucho más luminosa, la del individuo como fuerza de voluntad empeñada en una constante y eterna construcción de sí mismo y de su vida.

Lo que el huracán Katrina se llevó fue esa red/wire perversa dejando a las personas solas, abandonadas en medio de la devastación y creo que en Treme asistiremos al maravilloso milagro de la vida sucediendo sin esa red, de una esperanza pese a todo que encontrará en la música un instrumento esencial para su contagio y transmisión.

Intuyo mucha esperanza bajo el cansancio y la tristeza en Treme.

Ya me gusta, pero me va a gustar mucho más.

Ufff!



lunes, mayo 03, 2010

"Nosotros, como Dorian Gray, optamos por mantener ocultas nuestras cualidades negativas -en la esperanza de que nadie descubrirá su existencia- mientras mostramos un rostro inocente al mundo (la persona); creemos que es posible vencer a la sombra, despojarnos de la ambigüedad moral, expiar el pecado de Adán y -de nuevo Uno con Dios retornar al Jardín del Paraíso. Por ello inventamos Utopías, Eldorados o Shangrilas -lugares en los que la maldad es desconocida- por ello nos consolamos con la fábula marxista o rousseauniana de que el mal no se aloja en nuestro interior sino que es fruto de una sociedad «corrupta» que nos mantiene encadenados y que basta con cambiar a la sociedad para erradicar el mal definitivamente de la faz de la Tierra."
(Encuentro con la sombra. Connie Downing y Jeremy Abrahams)