domingo, octubre 10, 2010

ALICIA EN EL PAIS DE LAS MARAVILLAS

No termino de pillarle el punto a este nuevo trabajo de Tim Burton.

Esta amalgama creativa de los dos libros que Carroll escribió sobre la niña aventurera (Alicia en el pais de las maravillas y A través del espejo y lo que Alicia encontró allí) me deja bastante frío... y lo que es peor no me gusta ver con armadura y espada a este personaje de la literatura universal.

Empiezo a pensar en la asombrosa capacidad de banalización que nuestra cultura tiene consigo misma. Y tengo que confesar que me he revuelto como uno de mis gatos en la opiácea comodidad de mi sofá cuando esta Alicia de Tim Burton me ha recordado a un personaje de "El señor de los Anillos" con su espejeante armadura.

Está claro... Todo vale, de algo hay que vivir y Tim Burton hace películas.

De todos modos, y para los que no son tan raritos como yo, tengo que decir que la película resulta entretenida. Amenaza con aburrir en algún momento, pero enseguida Burton se saca una nueva imagen de su chistera de mercader sombrerero nada loco para continuar entreteniéndonos. Pero, e insisto, no me gusta que Alicia se convierta en un mero y tópico relato de crecimiento personal, a la altura de la más infame de las películas para la televisión... Como tampoco me gustan los cubitos de hielo en un dry martini bien hecho y Lewis Carroll sabía hacerlos muy bien.

TRANSPARENCIA


FERIA

Piensa que será más fácil si cierra los ojos,
si consigue olvidarse de la realidad exterior,
si logra concentrarse en el propio silencio,
en esa propia oscuridad que parece constituirle.
Quizá pueda escucharse.
Y más que nada en el mundo,
lo que desea por encima de todo
es sorprenderse.
INOLVIDABLE

Tom Waits... Downtown train...


NUBES

































sábado, octubre 09, 2010

CHASING MOZART




THE GLORY GUYS

Entre su exitosa carrera en la televisión y su fracasada carrera cinematográfica como director, llena por otra parte de obras maestras, el genial Sam Peckinpah escribió "The glory guys".

La lucha de dos hombres, un capitán de caballería y un jefe de exploradores, por el amor de una mujer vertebra una sucesión de lugares comunes del western que Peckinpah presenta con profesionalidad, pero sin genialidad, limitándose a dar cuerpo a una historia sin pretensiones.

En el texto quién les escribe encuentra detalles del universo narrativo del genial director norteamericano incluyendo a un personaje que pronuncia la frase "Why not?", presente en todas sus películas, pero su mirada vespertina y perezosa se conforma con quedarse a las puertas de un análisis más profundo.

En cualquier caso, lo más curioso de la historia es que sin referirse directamente "The Glory guys" relata la versión más fidedigna desde el punto de vista histórico de la escaramuza que tuvo lugar cerca del río Little Big Horn, una leyenda del Oeste en la que -para variar- salen ganando los indios y en la que el 7º de caballería del General Custer fue masacrado por una coalición de tribus encabezada por los Sioux Lakotas de Toro Sentado.

Desde la perspectiva de la columna que sobrevivió, apenas cambiando los nombres y en lugares que recuerdan a los auténticos, Peckinpah nos cuenta la verdad, no la leyenda, situando a la película perfectamente dentro de su obra. He escrito bastante sobre Peckinpah en este blog, sobre su visión épica del ser humano en lucha constante con sus propias contradicciones, la mayoría de ellas inevitables, que conducen al fracaso y al error y que sólo dejan la posibilidad entre los mejores de una incierta posibilidad de expiación mientras se cabalga de manera enloquecida hacia un nuevo fracaso, hacia un nuevo error.

La visión de Peckinpah es nihilista, pero también poética y romántica, de lucha hasta el último aliento en contra de las propias limitaciones, como mariposas que revolotean alrededor de un enorme fuego por el que se sienten atraídas y que terminará consumiéndolas en el más atrevido de sus vuelos. Los héroes de Peckinpah siempre tienen un instante de grandeza para comprenderse un segundo antes de arder y también otro instante, aún más grande, en el que deciden seguir volando hacia la aniquilación.

Why not?

Y continuar probándose, chocando una y otra vez contra sus propios límites.

Nada de éso hay en esta película.

No hay genialidad en "The glory guys"... y quizá sea pedirle mucho, pero alguien tiene que pagar este exceso de lluvia que se derrama allá afuera, donde no alcanzan las ventanas.
THE MAVERICKS

Bright side of the road...




Maravillosa entrevista publicada en El Malpensante de René Kantor al filósofo Michael Onfray a propósito de su libro en contra del psicoanálisis freudiano, "El crepúsculo de un ídolo".

Destruir el diván y dos perlas encontradas entre sus pedazos:

1
"Lo que fascina siempre a los sectarios es tener a su alcance una solución multiusos, que exime de ser inteligente, que no cuenta con la razón crítica, que exonera a la persona de todo uso racional de su pensamiento. Agreguemos que esta “religión” reúne a sujetos frágiles que gozan con la servidumbre y que disfrutan escuchando a un maestro depositario de la verdad universal y descubridor de certezas admirables. El gurú les da seguridad porque propone una sola llave que permite abrir todas las cerraduras: el complejo de Edipo. Esto le permite al sectario hacer caso omiso de sus angustias, de su soledad, de su miedo. En rebaño se siente mejor, fuerte, gracias a la debilidad de los que comparten establo con él. Una vez se vuelven locos, estos bovinos se metamorfosean en animales de horda, de banda, de jauría."

2
"Nuestra época es más histérica, más mediática, por lo tanto más superficial también. El desarrollo de internet permite internacionalizar al instante las declaraciones del primer cretino que aparece. Los periodistas han perdido toda deontología al mismo tiempo que todo talento: hoy en día el periodismo es una profesión –al menos el periodismo de ideas– saturada de estúpidos sin obra que dictan la ley desde lo alto de su indigencia, la cual llega a cimas inimaginables. Aquellos que no han creado nada destruyen lo que existe creyendo que la nada hecha por ellos alrededor de su propia persona vale como una prueba de su genio."
JOURNEY

Don't stop believing...
















"Conocí a un hombre sin corazón:
decían que los niños se lo habían arrancado
y se lo dieron a un lobo hambriento
que se lo llevó y desapareció.

Y los niños desaparecieron
y lejos huyó el lobo
y el hombre sin corazón
se tambaleaba como un borracho.

El otro día encontré a aquel hombre,
caminando con un grotesco orgullo,
su corazón restaurado y alegre su semblante:
a su lado el lobo caminaba dócilmente."
(Extraño poema.
El trueno más allá del Popocatépetl, Malcolm Lowry)

LOS FALSIFICADORES

Me fascinan las imágenes de personas que están de espaldas y frente al mar. El mar se me antoja siempre un inmenso espejo frente al que ellos parecen esperar pacientemente la llegada de algún reflejo...

"Los falsificadores" es una película apreciable, que cuenta una historia real, la del intento de la Alemania nazi por acabar con sus enemigos produciendo cantidades ingentes de dinero falso. Para ello encerraron dentro de un campo de concentración a falsificadores y expertos, la mayoría de ellos judíos, buscando la producción de dólares y libras falsos. Salomon Sorowitsch, el protagonista de "Los falsificadores", será pieza clave dentro del proceso merced a su condición de Rey de los Falsificadores en la Europa de preguerra.

Además, y este aspecto de la historia es el que me resulta más interesante, la película desarrolla un tema complejo y espinoso, el de la colaboración con el verdugo como consecuencia de la irresisitible propensión a la supervivencia que, como tal, tiene el animal humano. Durante toda la historia el colaborador Sorowitsch chocará con el más idealista Burger, que actuará a modo de irreal e ideal conciencia en un entorno donde los cuerpos que "padecen" esos ideales valen menos que nada.

Este sentimiento conflictivo de irresistible necesidad de supervivencia es el mismo que atormentó durante toda su vida al escritor italiano Primo Levi. Superviviente de Auschwitz y empleado por sus guardianes nazis como químico, Levi siempre se reprochó el haber sobrevivido, una supervivencia siempre basada en la utilidad que representaba para los verdugos del resto de sus compañeros.

Burger será siempre una mosca cojonera, un continuo reproche pronunciado contra el resto de sus compañeros dispuestos a hacer cualquier cosa por sobrevivir.

¿Qué harías tú, querido lector?

¿Qué sucede cuando nuestro modo de ver la vida nos opone a su rigurosa mecánica?

Más allá de las ideas y las palabras, sólo sabemos lo que en realidad somos cuando, desafiados por la realidad, actuamos...

En cualquier caso, y después de todo lo vivido, tiene todo el sentido que el camino de Sorowitsch termine junto al mar, en la interminable noche, a la espera de un nuevo reflejo a cuyo brillo poder engancharse y continuar.

Interesante.

La ironía es la forma más civilizada de ejercer la violencia.
QUEMADO POR EL SOL














THE LOSERS

No me dice mucho "The Losers".

Esta adaptación al comic de una historia de héroes traicionados en busca de redención y venganza tiene para mi un evidente aire enésimo, mecánico en el peor de los sentidos de la palabra; un aire que sólo se transmite a sí mismo, como mera presencia de un relato que es en realidad reflejo de otros tantos dentro de esa sala de espejos que es la necesidad de un soporte narrativo mínimo para los productos cinematográficos.

Nada termina de enganchar la suficiente.

El sabor de la magdalena proustiana en este caso es demasiado tenue, casi insignificante.

Olvidable.

Dos litros de agua,
seis piezas de fruta,
veinte minutos de carrera continua,
presencia impecable,
maquinaria engrasada...
el puntual desayuno de los campeones
de cada mañana intentando llenar
la amplitud cada vez mayor
de su estómago vacío.

miércoles, octubre 06, 2010

BRIAN ENO & JOHN CALE

Spinning away...




lunes, octubre 04, 2010

DERSU UZALA

Si uno lo mira bien, el cine de Akira Kurosawa es un cine terrible, constantemente enfrenta al hombre contra lo absurdo de la existencia y entiendo por "absurdo" la distancia que a veces las cosas y su estado guardan con respecto a nuestra necesidad intrínseca de encontrar un sentido.

No en vano el maestro japonés encontró en William Shakespeare un espejo donde reflejarse, centrando ese reflejo en esa frase que el maestro inglés repite dos veces, escribo de memoria (y seguro que me equivocaré), una en su "Rey Lear" y otra en "Macbeth". Esa que dice que la vida es un relato sin sentido contado por un loco lleno de ira.

Y puedo entender que Kurosawa se encontrase a si mismo, se viese reflejado en este relato autobiográfico del explorador ruso Vladimir Arseniev quién a principios del pasado siglo recorriese arriba y abajo por la inmensa taiga siberiana, en una época difícil de su vida. Viejo, arruinado, con un intento de suicidio a sus espaldas y con dificultades para retornar al mundo de cine (por edad y capacidad de financiación), puedo entender que Kurosawa abandonase su Japón natal y se embarcase en una coproducción con la Rusia soviética. Seguramente el viejo cineasta japonés viera algo de sí mismo, de su destino en el viaje de Dersu Uzala, el protagonista, hacia la decrepitud desde la vejez.

Es cierto que es una historia de amistad, pero, y por encima de todo, "Dersu Uzala" es un relato descarnado sobre lo que hay más allá de la vejez y que tiene que ver con la pérdida de control, con la incapacidad para continuar con la costumbre de continuar viviendo como si no hubiese cuerpo al que remitirse, con esos terribles prolegómenos en lo que lo inevitable empieza a manifestarse, a definirse como una realidad más allá de la cual ningún futuro es posible.

La emocionante amistad de Dersu y Arseniev nada podrá hacer para evitarlo.

"Dersu Uzala" es un intenso y sobrecogedor paseo bajo el inclemente sol de lo inevitable.




domingo, octubre 03, 2010











SPACE ODDITY

Los protocolos estaban claros.
Ecuaciones, incógnitas, constantes cuadráticas...
En muchas ocasiones le habían explicado
la manera correcta de proceder...
Jamás mirar a la inmensa y blanca luz
que ahora le abrazaba cálida,
probablemente mortal
(a tenor de los informes
basados en axiomas, paralelismos e hipótesis),
pero él estaba allí
y, simplemente,
no había podido evitarlo.

La primera anotación verbal
en su cuaderno de bitácora era clara,
se sentía grávido,
pesaba hacia arriba,
una fuerza le arrastraba.

Quizá había velocidad.
No estaba seguro.

Le faltaban preguntas
para el espectáculo de respuestas
que asombrado presenciaba.