MARAT/SADE
Este es el titulo corto.
El largo es "Persecución y asesinato de Jean Paul Marat interpretado por los locos del asilo de Charenton dirigidos por el Marques de Sade".
"Marat/Sade" es una caja china, una obra que escenifica una obra, que además participa del viejo adagio shakespeareano que considera la vida como una historia contada por un poco... En el "Marat/Sade" los locos la escenifican dirigidos por el mas loco de todos ellos: el marques de Sade.
El argumento de la obra que se representa gira en torno a las tres visitas que Charlotte Corday hizo a Jean Paul Marat antes de asesinarle en la tercera y todo sucede a principios del siglo XIX, años después de Revolución Francesa. Los dos autores, el Marques de Sade y el verdadero autor, el alemán Peter Weiss aprovechan este hecho puntual para pasar revista a la revolución desde la perspectiva de la verdadera posibilidad de llevar a la práctica un ideal en un mundo de seres humanos.
Y para desarrollar este planteamiento a Weiss le viene perfecto la voz del Marques de Sade para desplegar un discurso de cuestionamiento que reduce la revolución a un acto cruel que seduce al propio Marques de Sade con una propuesta racional y uniformizadora, desconsiderada con la individualidad del ser humano, que se materializa en el brazo ejecutor del terror jacobino.
martes, agosto 16, 2011
13 Asesinos
Los despiadados excesos que amparado en su condición el hermano de Shogun va dejando a su paso obligan a los hombres de confianza de éste a buscar una solución extrema. De una forma privada, extraoficial, el samurai Shinzaemon Shimada aceptará el trabajo de dar muerte al despiadado Lord Naritsugu.
Shimada reclutará a otros doce samurais y buscará la manera de cumplir con el trabajo asignado, una misión suicida que le llevará a enfrentarse a un enemigo mucho más numeroso.
"13 asesinos" es una película de acción centrada en una situación: la emboscada que Shimada y sus hombres realizan al séquito de Lord Narigatsu. Y en este sentido es una narración eficaz que consigue entretener en todo momento.
No creo que aspire a mas y desde luego que lo consigue, en la presentación del cruel Lord Naritsugu y especialmente en la tremenda batalla final. Cuarenta y cinco minutos de un sangriento y agónico combate brutal, cuerpo a cuerpo, sin concesiones.
Entretenida.
lunes, agosto 15, 2011
LA PARTE MALDITA
Talento interdisciplinar e inclasificable Georges Bataille es el vivo ejemplo del pensador renacentista, única y exclusivamente arrastrado y dependiente del natural fluir de su pensar.
Su obra es extensa y abarca desde el erotismo hasta la religión y en ella ocupa un lugar importante este "La parte maldita" en el que, sin ser economista, Bataille aborda el fenómeno de lo económico desde la heterodoxa piel de su pensar.
Esa parte maldita que da titulo al texto es el gasto improductivo y Bataille dedica todo el libro a razonar y justificar la necesidad de su existencia como parte integrante y culminante del proceso de gestión y aprovechamiento de los recursos que en última instancia la economía es.
Para Bataille el gasto improductivo no es otra cosa que el lado oculto, la otra cara del proceso productivo y constructivo de acumulación y a su entender justifica incluso la existencia de la propia actividad económica. No tiene sentido la acumulación sin un posterior derroche de lo que se considera valioso como acto de afirmación individual y colectivo de esa fuerza que ha llevado a la acumulación.
A lo largo del libro Bataille hace un repaso histórico desde el sacrificio de esclavos de las culturas mesoamericanas hasta los gastos suntuarios como expresión de poder que realizaba la nobleza medieval pasando por instituciones como el Potlach, un repaso que sitúa a la economía como dependiente de un proceso simbólico de afirmación del poder por parte de aquellos que lo detentan. El gasto improductivo como primera prueba de un poder que es capaz de desprenderse sin dolor de una determinada cantidad de riqueza.
Para Bataille el exceso es el irrevocable punto de partida de todas las cosas, desde lo biológico hasta lo social. Aquella parte de la energía que no se acumula sino que se transmite al exterior sin obtener nada a cambio. Por ejemplo, y a nivel biológico, Bataille pone el siguiente ejemplo: sólo el 10% de la cantidad de energía ingerida procedente de las plantas es acumulada por los animales hervíboros, el resto es gastada en crecer, en existir, en reproducirse... De algún modo se devuelve al exterior, se vuelve a poner en juego.
Si la economía empieza en la gestión de unos recursos que son escasos siempre termina generando una inevitable gestión del exceso imprescindible para la existencia y el desarrollo de lo vivo; una gestión del exceso que encarna en los sistemas biológicos la tendencia a la entropía energética que es una constante de la naturaleza en que existimos.
Y sin embargo esa necesidad del exceso permanece oculta, en la sombra de nuestra percepción constructiva de las cosas que solo vive para cumular, aunque siempre apareciendo como incomprensible síntoma porque nunca hay construcción sin destrucción, acumulación sin gasto; convertido en el conjunto de todos esos eventos incomprensibles que desde lo pulsional de una inevitable necesidad comprometen el tranquilo panorama brillante de nuestra racionalidad y que para entendernos llamamos "mal".
Para Bataille, y éste es el concepto más heterodoxo de todos, el mal es una parte constitutiva de nuestra realidad. No es algo que se pueda extirpar. Las religiones monoteístas viven de esa ilusión y sobre todo de esa deuda externa imposible de pagar que se denomina pecado.
Otra cosa es que las sociedades sean en mayor o menor medida capaces de reconocer esa realidad y generen instituciones capaces de dar rienda suelta a toda esa energía acumulada de una manera tolerable, garantizando así la necesaria cohesión integradora imprescindible tanto para su existencia como para su mantenimiento.
Brillante.
Bataille Georges La Parte Maldita OCR
Talento interdisciplinar e inclasificable Georges Bataille es el vivo ejemplo del pensador renacentista, única y exclusivamente arrastrado y dependiente del natural fluir de su pensar.
Su obra es extensa y abarca desde el erotismo hasta la religión y en ella ocupa un lugar importante este "La parte maldita" en el que, sin ser economista, Bataille aborda el fenómeno de lo económico desde la heterodoxa piel de su pensar.
Esa parte maldita que da titulo al texto es el gasto improductivo y Bataille dedica todo el libro a razonar y justificar la necesidad de su existencia como parte integrante y culminante del proceso de gestión y aprovechamiento de los recursos que en última instancia la economía es.
Para Bataille el gasto improductivo no es otra cosa que el lado oculto, la otra cara del proceso productivo y constructivo de acumulación y a su entender justifica incluso la existencia de la propia actividad económica. No tiene sentido la acumulación sin un posterior derroche de lo que se considera valioso como acto de afirmación individual y colectivo de esa fuerza que ha llevado a la acumulación.
A lo largo del libro Bataille hace un repaso histórico desde el sacrificio de esclavos de las culturas mesoamericanas hasta los gastos suntuarios como expresión de poder que realizaba la nobleza medieval pasando por instituciones como el Potlach, un repaso que sitúa a la economía como dependiente de un proceso simbólico de afirmación del poder por parte de aquellos que lo detentan. El gasto improductivo como primera prueba de un poder que es capaz de desprenderse sin dolor de una determinada cantidad de riqueza.
Para Bataille el exceso es el irrevocable punto de partida de todas las cosas, desde lo biológico hasta lo social. Aquella parte de la energía que no se acumula sino que se transmite al exterior sin obtener nada a cambio. Por ejemplo, y a nivel biológico, Bataille pone el siguiente ejemplo: sólo el 10% de la cantidad de energía ingerida procedente de las plantas es acumulada por los animales hervíboros, el resto es gastada en crecer, en existir, en reproducirse... De algún modo se devuelve al exterior, se vuelve a poner en juego.
Si la economía empieza en la gestión de unos recursos que son escasos siempre termina generando una inevitable gestión del exceso imprescindible para la existencia y el desarrollo de lo vivo; una gestión del exceso que encarna en los sistemas biológicos la tendencia a la entropía energética que es una constante de la naturaleza en que existimos.
Y sin embargo esa necesidad del exceso permanece oculta, en la sombra de nuestra percepción constructiva de las cosas que solo vive para cumular, aunque siempre apareciendo como incomprensible síntoma porque nunca hay construcción sin destrucción, acumulación sin gasto; convertido en el conjunto de todos esos eventos incomprensibles que desde lo pulsional de una inevitable necesidad comprometen el tranquilo panorama brillante de nuestra racionalidad y que para entendernos llamamos "mal".
Para Bataille, y éste es el concepto más heterodoxo de todos, el mal es una parte constitutiva de nuestra realidad. No es algo que se pueda extirpar. Las religiones monoteístas viven de esa ilusión y sobre todo de esa deuda externa imposible de pagar que se denomina pecado.
Otra cosa es que las sociedades sean en mayor o menor medida capaces de reconocer esa realidad y generen instituciones capaces de dar rienda suelta a toda esa energía acumulada de una manera tolerable, garantizando así la necesaria cohesión integradora imprescindible tanto para su existencia como para su mantenimiento.
Brillante.
Bataille Georges La Parte Maldita OCR
40 años antes, Baudrillard habla de la reciente violencia londinense:
"Si la violencia eruptiva, inasequible, de las bandas juveniles de Estocolmo, de los desórdenes de Montreal, de los asesinatos de Los Angeles se nos presentan como una manifestación inusitada,
incomprensible, aparentemente contradictoria con el progreso social y la abundancia, ello se debe a que vivimos con la idea tradicional de la práctica del bienestar como actividad racional. Esa violencia nos parece innominable, absurda, diabólica, porque vivimos con la ilusión moral de la finalidad consciente de todas las cosas, de la racionalidad fundamental de las decisiones individuales y colectivas (todo el sistema de valores se funda en este principio: en el consumidor hay un instinto absoluto que lo lleva, por su esencia, a sus fines preferenciales,
mito moral del consumo heredado totalmente del mito idealista según el cual el hombre tiende naturalmente hacia lo Bello y el Bien). Ahora bien, esa violencia probablemente sólo quiera decir que algo desborda ampliamente los objetivos conscientes de satisfacción y de bienestar mediante los cuales esta sociedad se justifica (a sus propios ojos), a través de los cuales se reinscribe en las normas de racionalidad consciente. En este sentido, esa violencia inexplicada debe hacernos revisar todas nuestras ideas sobre la abundancia: la abundancia y la violencia van a la par, por lo tanto, deben analizarse conjuntamente.
El problema más general en que se inscribe la cuestión de esta violencia «sin objeto», aún esporádica en algunos países, pero virtualmente endémica en todos los países desarrollados e hiperdesarrollados, es el de las contradicciones fundamentales de la abundancia"
(La sociedad de consumo: sus mitos, sus estructuras. Jean Baudrillard)
"Si la violencia eruptiva, inasequible, de las bandas juveniles de Estocolmo, de los desórdenes de Montreal, de los asesinatos de Los Angeles se nos presentan como una manifestación inusitada,
incomprensible, aparentemente contradictoria con el progreso social y la abundancia, ello se debe a que vivimos con la idea tradicional de la práctica del bienestar como actividad racional. Esa violencia nos parece innominable, absurda, diabólica, porque vivimos con la ilusión moral de la finalidad consciente de todas las cosas, de la racionalidad fundamental de las decisiones individuales y colectivas (todo el sistema de valores se funda en este principio: en el consumidor hay un instinto absoluto que lo lleva, por su esencia, a sus fines preferenciales,
mito moral del consumo heredado totalmente del mito idealista según el cual el hombre tiende naturalmente hacia lo Bello y el Bien). Ahora bien, esa violencia probablemente sólo quiera decir que algo desborda ampliamente los objetivos conscientes de satisfacción y de bienestar mediante los cuales esta sociedad se justifica (a sus propios ojos), a través de los cuales se reinscribe en las normas de racionalidad consciente. En este sentido, esa violencia inexplicada debe hacernos revisar todas nuestras ideas sobre la abundancia: la abundancia y la violencia van a la par, por lo tanto, deben analizarse conjuntamente.
El problema más general en que se inscribe la cuestión de esta violencia «sin objeto», aún esporádica en algunos países, pero virtualmente endémica en todos los países desarrollados e hiperdesarrollados, es el de las contradicciones fundamentales de la abundancia"
(La sociedad de consumo: sus mitos, sus estructuras. Jean Baudrillard)
EL CASO FAREWELL
"Farewell" es el nombre en clave con el que el coronel Sergei Grigoriev es bautizado por los servicios secretos occidentales que reciben sus informaciones.
"El caso Farewell" es una de esas historias basadas en hechos reales en las que la realidad parece superar a la ficción. El coronel Grigoriev existió y ocupó una posición estratégica dentro de la inteligencia soviética. En un momento determinado llega a la conclusión de que el sistema soviético está agotado y decide reventar desde dentro la esclerotizada estructura soviética suministrando información estratégica a los aliados occidentales.
Para ello utilizará medios no convencionales dentro del espionaje, recurrirá a un ejecutivo medio de la compañía Thomson destinado en Moscú cuyo jefe tiene lazos con el ministerio del interior francés... Un medio alejado de los lugares y personales sobre los que el contraespionaje soviético tenía puesto el foco.
La película es un mas que estimable relato de espionaje en cuyo centro brilla el personaje de Grigoriev, sus motivaciones más que altruistas ya que en ningún momento quiere dinero por unas informaciones que, según el mismo dice, no tiene precio. Su objetivo queda siempre claro junto con su defensa de los valores de la Revolución que dio lugar a la decadente y desnortada sociedad soviética en la que vive.
La historia con mayúsculas no ha seguido los derroteros que Grigoriev buscaba con su traición, pero de alguna manera este personaje encarna lo mejor del idealismo que dio lugar a tan fracasada aventura histórica, lo que le convierte en un fascinante personaje con el que de algún modo la propia revolución se pone fin utilizando el mismo idealismo que la vio nacer para dispararse en la cabeza.
En un momento determinado aparecen algunas secuencias de "El hombre que mató a Liberty Valance" de John Ford para establecer la sugerencia de un paralelismo entre Grigoriev y el Tom Doniphon, el verdadero héroe de una historia hecha posible por su sacrificio y que al mismo tiempo le relega a un lugar entre las sombras mientras sobre otros se concentra todas las palabras, toda la luz.
Es el destino de los heterodoxos.
Mención especial para el director serbio Emir Kusturica increíblemente capaz de dar vida a un inolvidable Grigoriev.
Brillante.
"Farewell" es el nombre en clave con el que el coronel Sergei Grigoriev es bautizado por los servicios secretos occidentales que reciben sus informaciones.
"El caso Farewell" es una de esas historias basadas en hechos reales en las que la realidad parece superar a la ficción. El coronel Grigoriev existió y ocupó una posición estratégica dentro de la inteligencia soviética. En un momento determinado llega a la conclusión de que el sistema soviético está agotado y decide reventar desde dentro la esclerotizada estructura soviética suministrando información estratégica a los aliados occidentales.
Para ello utilizará medios no convencionales dentro del espionaje, recurrirá a un ejecutivo medio de la compañía Thomson destinado en Moscú cuyo jefe tiene lazos con el ministerio del interior francés... Un medio alejado de los lugares y personales sobre los que el contraespionaje soviético tenía puesto el foco.
La película es un mas que estimable relato de espionaje en cuyo centro brilla el personaje de Grigoriev, sus motivaciones más que altruistas ya que en ningún momento quiere dinero por unas informaciones que, según el mismo dice, no tiene precio. Su objetivo queda siempre claro junto con su defensa de los valores de la Revolución que dio lugar a la decadente y desnortada sociedad soviética en la que vive.
La historia con mayúsculas no ha seguido los derroteros que Grigoriev buscaba con su traición, pero de alguna manera este personaje encarna lo mejor del idealismo que dio lugar a tan fracasada aventura histórica, lo que le convierte en un fascinante personaje con el que de algún modo la propia revolución se pone fin utilizando el mismo idealismo que la vio nacer para dispararse en la cabeza.
En un momento determinado aparecen algunas secuencias de "El hombre que mató a Liberty Valance" de John Ford para establecer la sugerencia de un paralelismo entre Grigoriev y el Tom Doniphon, el verdadero héroe de una historia hecha posible por su sacrificio y que al mismo tiempo le relega a un lugar entre las sombras mientras sobre otros se concentra todas las palabras, toda la luz.
Es el destino de los heterodoxos.
Mención especial para el director serbio Emir Kusturica increíblemente capaz de dar vida a un inolvidable Grigoriev.
Brillante.
domingo, agosto 14, 2011
HIPÓTESIS
- En la segunda mitad del siglo pasado y como consecuencia de la dinámica de bloques de la guerra fria, el bloque capitalista encuentra útil el despliegue de la sociedad de consumo en las sociedades occidentales no sólo por motivos directamente relacionados con su reproducción y viabilidad como sistema sino también como manera infalible de generar adhesiones inquebrantables entre aquellos que podrían engrosar las filas del enemigo en un momento determinado... Y sucede el aburguesamiento de la clase obrera, la cesión de una parte de la renta.
- A finales del siglo pasado, y como consecuencia del derrumbamiento del otro bloque que se revela como un fracaso en su papel de alternativa, los ideologos neoliberales empiezan la tarea de recuperar esa renta transferida de aquellos que ya no son vistos como una amenaza... Y sucede el progresivo proceso de globalización con el pensamiento neoliberal como mascarón de proa, el cada vez más descarado proceso de trasvase de renta en dirección de regreso y desde el estado de bienestar hacia quienes se consideran sus verdaderos propietarios: los superpredadores de los mercados... incluso hasta límites que complican la viabilidad de la sociedad de consumo como tal mostrando los límites de la utopía neoliberal de los mercados que se autorregulan: en los bajos funciona una caótica y proteica estructura basada en el enriquecimiento irresponsable y a toda costa.
- En la segunda mitad del siglo pasado y como consecuencia de la dinámica de bloques de la guerra fria, el bloque capitalista encuentra útil el despliegue de la sociedad de consumo en las sociedades occidentales no sólo por motivos directamente relacionados con su reproducción y viabilidad como sistema sino también como manera infalible de generar adhesiones inquebrantables entre aquellos que podrían engrosar las filas del enemigo en un momento determinado... Y sucede el aburguesamiento de la clase obrera, la cesión de una parte de la renta.
- A finales del siglo pasado, y como consecuencia del derrumbamiento del otro bloque que se revela como un fracaso en su papel de alternativa, los ideologos neoliberales empiezan la tarea de recuperar esa renta transferida de aquellos que ya no son vistos como una amenaza... Y sucede el progresivo proceso de globalización con el pensamiento neoliberal como mascarón de proa, el cada vez más descarado proceso de trasvase de renta en dirección de regreso y desde el estado de bienestar hacia quienes se consideran sus verdaderos propietarios: los superpredadores de los mercados... incluso hasta límites que complican la viabilidad de la sociedad de consumo como tal mostrando los límites de la utopía neoliberal de los mercados que se autorregulan: en los bajos funciona una caótica y proteica estructura basada en el enriquecimiento irresponsable y a toda costa.
EL RIO
Es la última gran película del maestro Jean Renoir.
Basada en un relato de la escritora inglesa Rumer Godden cuya obra tiene como motivo y lugar la India, "El Rio" es una historia que se propone contarnos la iniciación a la vida de Alice, una adolescente que bien podría ser un alter ego de la propia escritoria.
Igual que las aguas del río fluyen, el acontecer de la vida sucede inevitablemente desencadenando momentos que una vez que suceden nos cambian, desencadenan un antes y un después, nos arrastran hacia delante en un natural fluir de la existencia. Y ese es el propósito del maestro Renoir: captar la magia de ese instante que sucede y que luego enseguida pasa reemplazado por otro que lo convierte en pasado, materia para la memoria.
"El Rio" es una película sutil, en la que casi no sucede nada, pero en la que Jean Renoir consigue destilar la imposible piedra filosofal de los instantes, enmarcados en un tiempo que incesantemente los arrebata a quienes casi sin darse cuenta los habitan.
Nos habla de la primera conciencia de ese estar inmerso de manera inevitable en esa aparentemente interminable dinámica de idas y venidas
Es la imposible escenificación de la vida misma sucediendo, generando materia para el recuerdo, para la melancolía.
Obra maestra.
Es la última gran película del maestro Jean Renoir.
Basada en un relato de la escritora inglesa Rumer Godden cuya obra tiene como motivo y lugar la India, "El Rio" es una historia que se propone contarnos la iniciación a la vida de Alice, una adolescente que bien podría ser un alter ego de la propia escritoria.
Igual que las aguas del río fluyen, el acontecer de la vida sucede inevitablemente desencadenando momentos que una vez que suceden nos cambian, desencadenan un antes y un después, nos arrastran hacia delante en un natural fluir de la existencia. Y ese es el propósito del maestro Renoir: captar la magia de ese instante que sucede y que luego enseguida pasa reemplazado por otro que lo convierte en pasado, materia para la memoria.
"El Rio" es una película sutil, en la que casi no sucede nada, pero en la que Jean Renoir consigue destilar la imposible piedra filosofal de los instantes, enmarcados en un tiempo que incesantemente los arrebata a quienes casi sin darse cuenta los habitan.
Nos habla de la primera conciencia de ese estar inmerso de manera inevitable en esa aparentemente interminable dinámica de idas y venidas
Es la imposible escenificación de la vida misma sucediendo, generando materia para el recuerdo, para la melancolía.
Obra maestra.
sábado, agosto 13, 2011
FUEGO FATUO
Dirigida en 1963 por Louis Malle, "Fuego fatuo" es una de sus mejores obras.
La película adapta un texto homónimo del escritor francés Pierre Drieu La Rochelle que cuenta las últimas horas de Alain, un hombre que ha decidido quitarse la vida y antes de hacerlo pasa sus últimas horas despidiéndose de sus amigos y exhibiendo ante ellos su nihilismo y desesperación.
Por lo visto, el fuego fatuo es un fenómeno físico que es consecuencia colateral de los procesos de descomposición de los cuerpos vivos, una especie de tenue luminosidad que brota de la materia que ya no está viva y se mantiene a poca distancia del suelo. Y hay que decir que se trata del titulo perfecto para una historia que no hace otra cosa que mostrarnos la descomposición interior de Alain, el protagonista, magnificamente encarnado por Maurice Ronet. De esa descomposición surge una luminosidad, una cierta claridad que por primera vez orienta a un confundido Alain y que le permite comprender el -a su entender- absurdo de la realidad que le rodea y que incluye a su propia vida.
Drieu La Rochelle era un autor obsesionado con la decadencia y lo que nos nuestra Malle con imágenes precisas, abundantes en primeros planos, magníficamente fotografiadas en blanco y negro, es la decadencia de Alain, un eterno adolescente atrapado en la telaraña de un mundo que parece haber evolucionado por su cuenta hacia una madurez que Alain ni comprende ni quiere, aunque, y al mismo tiempo, desanimado, se sienta incapaz de mantener el estilo de vida que llevaba.
Incapaz de optar por una de las dos opciones, Alain se ahoga en una nada que le devora mientras se mueve por las calles de Paris encontrando amigos que sin embargo han sido capaces de optar por una u otra, mantenerse en una vida bohemia u optar por la asunción de las "responsabilidades" de una vida madura. Pero, y a los ojos de Alain, todas esas vidas se le antojan inaccesibles verdades que Alain en su desesperación no puede tocar ni entender.
Atormentado por sus miedos, fracasos y limitaciones, Alain no puede ver más allá de su propio dolor y continua su camino dejando atrás las manos que la vida le tiende.
"Fuego fatuo" es un drama intimista y melancólico en el que la nada que ha corrompido el mirar de Alain es el verdadero protagonista.
Extraordinaria.
Dirigida en 1963 por Louis Malle, "Fuego fatuo" es una de sus mejores obras.
La película adapta un texto homónimo del escritor francés Pierre Drieu La Rochelle que cuenta las últimas horas de Alain, un hombre que ha decidido quitarse la vida y antes de hacerlo pasa sus últimas horas despidiéndose de sus amigos y exhibiendo ante ellos su nihilismo y desesperación.
Por lo visto, el fuego fatuo es un fenómeno físico que es consecuencia colateral de los procesos de descomposición de los cuerpos vivos, una especie de tenue luminosidad que brota de la materia que ya no está viva y se mantiene a poca distancia del suelo. Y hay que decir que se trata del titulo perfecto para una historia que no hace otra cosa que mostrarnos la descomposición interior de Alain, el protagonista, magnificamente encarnado por Maurice Ronet. De esa descomposición surge una luminosidad, una cierta claridad que por primera vez orienta a un confundido Alain y que le permite comprender el -a su entender- absurdo de la realidad que le rodea y que incluye a su propia vida.
Drieu La Rochelle era un autor obsesionado con la decadencia y lo que nos nuestra Malle con imágenes precisas, abundantes en primeros planos, magníficamente fotografiadas en blanco y negro, es la decadencia de Alain, un eterno adolescente atrapado en la telaraña de un mundo que parece haber evolucionado por su cuenta hacia una madurez que Alain ni comprende ni quiere, aunque, y al mismo tiempo, desanimado, se sienta incapaz de mantener el estilo de vida que llevaba.
Incapaz de optar por una de las dos opciones, Alain se ahoga en una nada que le devora mientras se mueve por las calles de Paris encontrando amigos que sin embargo han sido capaces de optar por una u otra, mantenerse en una vida bohemia u optar por la asunción de las "responsabilidades" de una vida madura. Pero, y a los ojos de Alain, todas esas vidas se le antojan inaccesibles verdades que Alain en su desesperación no puede tocar ni entender.
Atormentado por sus miedos, fracasos y limitaciones, Alain no puede ver más allá de su propio dolor y continua su camino dejando atrás las manos que la vida le tiende.
"Fuego fatuo" es un drama intimista y melancólico en el que la nada que ha corrompido el mirar de Alain es el verdadero protagonista.
Extraordinaria.
viernes, agosto 12, 2011
"El nuevo autoritarismo es diferente a los regímenes del viejo estilo represivo. En el pasado el autoritarismo tenía una cara militar, negaba las libertades individuales y la oposición electoral. El nuevo autoritarismo es un régimen híbrido que combina procesos electorales y libertades individuales con estructuras de toma de decisión altamente elitistas. Mientras acontecen las elecciones, no hay correspondencia entre la retórica populista o social durante la campaña electoral y el gobierno postelectoral en el cual la dura austeridad neoliberal controla las políticas de ajuste estructural, y éstas últimas son aplicadas. El uso deliberado de decepciones políticas llama a cuestionar el significado real de "elecciones competitivas" como se ha dispuesto en la elección que ha hecho el votante y como un medio de influenciar en el electorado a lo largo del proceso político. Por otro lado, el cada vez mayor uso de decretos ejecutivos para implementar la agenda neoliberal (prívatizaciones, políticas de ajuste estructural, etc.) es mucho más similar al estilo de los regímenes del antiguo autoritarismo que a las prácticas democráticas...
... El neoautoritarismo, es un sistema híbrido que combina las tomas de decisión de élite y los procesos electorales, el cuerpo legislativo elegido y el corporativo no elegido que toma decisiones, campañas electorales y prácticas de decreto, minan la noción de una cultura cívica. En este contexto es importante examinar de una manera crítica el significado de ciudadanía desde dos ángulos: ciudadanía "formal" y substantiva. La ciudadanía formal se refiere a los atributos legales destinados al ciudadano según una constitución escrita o no escrita. La ciudadanía substantiva se refiere a la capacidad de los individuos a ejercitar el poder en el debate actual de la resolución de cuestiones políticas. Hoy en día, a los ciudadanos se les niega sistemáticamente el derecho de voz y voto en las cuestiones substantivas más profundas que afectan a sus vidas -incluyendo el gasto de estado, impuestos, privatización, programas de austeridad, subsidios para multinacionales, etc. Para encubrir esta negación hacia los ciudadanos los defensores elitistas del estado liberal se refieren a nociones amorfas de "sociedad civil" y "globalización"."
(Escritos, 1999-2006. James Petras)
... El neoautoritarismo, es un sistema híbrido que combina las tomas de decisión de élite y los procesos electorales, el cuerpo legislativo elegido y el corporativo no elegido que toma decisiones, campañas electorales y prácticas de decreto, minan la noción de una cultura cívica. En este contexto es importante examinar de una manera crítica el significado de ciudadanía desde dos ángulos: ciudadanía "formal" y substantiva. La ciudadanía formal se refiere a los atributos legales destinados al ciudadano según una constitución escrita o no escrita. La ciudadanía substantiva se refiere a la capacidad de los individuos a ejercitar el poder en el debate actual de la resolución de cuestiones políticas. Hoy en día, a los ciudadanos se les niega sistemáticamente el derecho de voz y voto en las cuestiones substantivas más profundas que afectan a sus vidas -incluyendo el gasto de estado, impuestos, privatización, programas de austeridad, subsidios para multinacionales, etc. Para encubrir esta negación hacia los ciudadanos los defensores elitistas del estado liberal se refieren a nociones amorfas de "sociedad civil" y "globalización"."
(Escritos, 1999-2006. James Petras)
jueves, agosto 11, 2011
"A través de la publicidad, que es ya en sí misma un servicio social, todos los productos se presentan como servicios, todos ios procesos económicos reales se hacen aparecer y se reinterpretan socialmente como efectos de dádiva, de fidelidad personal y de relación afectiva. Poco importa que esa munificencia, como la de los potentados, nunca sea más que la redistribución funcional de una parte de los beneficios. La astucia de la publicidad estriba precisamente en sustituir en todas partes la lógica del mercado por la magia del Carguero (la abundancia total y milagrosa con que sueñan los indígenas).
(La sociedad de consumo: sus mitos, sus estructuras. Jean Baudrillard)
(La sociedad de consumo: sus mitos, sus estructuras. Jean Baudrillard)
Interesante artículo de Gavin Knight en El País:
"Reino Unido es desde hace algún tiempo dos países. Está el que todo el mundo conoce, el de la próspera economía de clase media. Y luego están los barrios céntricos pobres de los que nadie habla o informa, como su fueran un país del Tercer Mundo o una zona de guerra."
(El lado oculto del Reino Unido)
Y no... la culpa no sólo es de los padres.
"La Unidad de Reducción de la Violencia de la policía de Strathclyde trata ahora la violencia como una enfermedad infecciosa, transmitida por los padres o los amigos."
Es no entender nada...
El incremento de la desigualdad en la riqueza genera este tipo de situaciones, de bolsas marginales sin esperanza. La mayoría de ellos podrían ser héroes y optar en un entorno hostil por lo constructivo, por abrir una tienda por ejemplo, pero culparles de no ser perfectos es jugar con ventaja. Si las condiciones contextuales son desesperanzadas y destructivas, la gran mayoría optará por una cultura de "ghetto" y violencia, sencillamente porque el ser humano está hecho así.
Y de cuando en cuando esos bárbaros salen a la calle llevándose por delante la paz social de los elegidos y jodiendo de paso la perfecta estabilidad de la teoría.
Las políticas neoliberales no son especiales, también tienen consecuencias sociales. Y son sus realistas y sensatos impulsores los primeros que deberían saber que nada es gratis en la vida.
Los sueños de la razón siempre traen consigo sus propios monstruos y los monstruos... bueno... es lo que tienen: que son monstruos.
miércoles, agosto 10, 2011
"En todas las sociedades modernas, este sistema de gratificación y de solicitud tiene apoyos oficiales: todas las instituciones de redistribución social (Seguridad Social, Caja de jubilación, subsidios y pensiones múltiples, subvenciones, primas, becas) constituyen canales por los cuales, dice E Perroux, «los poderes públicos se sienten impulsados a corregir los excesos de poder de los monopolios, mediante flujos de prestaciones sociales destinadas a satisfacer necesidades y no a remunerar los servicios productivos. Estas últimas transferencias, sin contrapartida aparente, disminuyen, a largo plazo, la agresividad de las clases llamadas peligrosas». No analizaremos aquí la eficacia real de esta redistribución ni sus mecanismos económicos. Lo que nos interesa es el mecanismo psicológico colectivo que pone en funcionamiento. Gracias a sus deducciones y a sus transferencias económicas, la instancia social (es decir, el orden establecido) se da como beneficio psicológico de la generosidad, se ofrece como instancia caritativa. Todas estas instituciones se caracterizan por utilizar un léxico maternal y proteccionista: Seguridad Social, seguros, protección de la infancia, de la vejez, subsidio por desempleo. Esta «caridad» burocrática, estos mecanismos de «solidaridad colectiva» —todos ellos, además, «conquistas sociales»— funcionan así, a través de la operación ideológica de redistribución, como mecanismos de control social. Es como si se sacrificara cierta parte de la plusvalía para preservar la otra, es decir, el sistema global de poder se sostiene en virtud de esta ideología de la munificencia cuyo beneficio se oculta detrás de la «dádiva». Se matan dos pájaros de un tiro: el asalariado está contento de recibir, bajo pretexto de don o de prestación «gratuita», una parte de lo que ya se le ha despojado anteriormente."
(La sociedad de consumo: sus mitos, sus estructuras. Jean Baudrillard)
(La sociedad de consumo: sus mitos, sus estructuras. Jean Baudrillard)
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