miércoles, mayo 18, 2011

DOMINIQUE STRAUSS-KHAN

Me cuesta creer que alguien tan irresponsable como para arriesgarse a hacer públicos sus vicios privados de una manera tan expuesta, como un jefe de cajeras de una gran superficie, pasándose por la bragueta su pasado, presente y futuro haya llegado tan alto.

Me cuesta creerlo, pero quizá sea cierto y las cosas estén así de mal, tan mal como para que cualquiera pueda llegar a presidir el Fondo monetario Internacional.

En cualquier caso, y de resultar culpable el señor Khan, el hecho no dejará de ser uno de esos eventos extraordinarios, tan metafóricamente palmarios que hablan sin parar por si solos a quién quiera o pueda escucharlos.

Tan simple como ésto: el gran papa del dinero violando al más humilde de los trabajadores.

Pura, sangrante y caliente metáfora de este mundo en que vivimos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario