HISTORIA GENERAL DE LOS ROBOS Y ASESINATOS DE LOS MÁS FAMOSOS PIRATAS
Publicado en 1724 por el escritos Daniel Defoe bajo el seudónimo Capitán Charles Johnson, esta "Historia general de los robos y asesinatos de los más famosos piratas" es un libro de libros.
Y lo es en un doble sentido.
Por un lado, es la fuente inicial que produjo el imaginario que posteriores escritores utilizaron para construir sus historias de ficción sobre piratería y por otro, y teniendo en cuenta su carácter "serio" de crónica, los hechos en mayor o menor medida verídicos que se narran encierran la posibilidad de cientos de historias de piratas (ya escritas o por escribir) hasta el punto de que uno tiene la sensación de que en cada párrafo brilla la posibilidad de un relato o una novela.
Y es este punto, a mi entender, una característica ambivalente del libro de Deföe ya que la sucesión de historias y el ajustado relato de los hechos que en ella se cuentan termina por resultar agotador para el lector.
Lo descriptivo, casi burocrático, prima sobre lo literario hasta el punto de que el libro se disfruta más en su comienzo que en su final.
Dividido en dos partes, la primera de las cuales ya aborda la historia de diecisiete distintos piratas, las historias terminan por resultar demasiado parecidas y familiares contribuyendo al distanciamiento por parte del lector el estilo frío y preciso, adecuado al informe que el libro pretende ser... si lo que uno busca es imaginación y literatura.
No obstante, esta crónica de piratas es un libro de lectura absoluta recomendable para conocer la realidad de este mundo que tan propenso ha sido para generar historias en su seno.
Algunas historias, como la del pirata francés Misson, consiguen traspasar la formal frontera del informe para ser una auténtica aventura por sí misma que se disfruta palabra a palabra desde la Francia prerevolucionaria hasta la isla de Madagascar.
En definitiva, esta historia de Deföe proporciona al lector material para soñar desde un acercamiento que se pretende fidedigno y que convierte al autor en un notario más que en un escritor. Y si lo que se busca es acercarse al fenómeno desde el punto de vista histórico -que es la razón de ser del libro- es el libro perfecto e imprescindible para comprender la realidad del pirata y la piratería.
Un fenómeno sorprendentemente circunscrito a un corto periodo de tiempo, el primer cuarto del siglo XVIII y en cuyo origen está las posibilidades que el mar, frontera todavía por conquistar por el poder de los estados, ofrecía a los desheredados para escapar a su mísera condición. Llama especialmente la atención de la existencia de piratas crueles y asesinos, pero también de piratas buenos, como Misson, hombres fuera de la ley pero que mantenían una relación bastante civilizada con la violencia... en ocasiones mucho más civilizadas que sus legitimados por al ley perseguidores.
Además, la piratería presenta otra cualidad interesante y relativamente desconocida y es su carácter de experimento democrático entre aquellos que se consideraban iguales en la desgracia. Entre otras cosas, en todo barco pirata el poder del capitán era contrabalanceado por una especie de tribuno de la plebe, generalmente un hombre mayor y con experiencia, cuyas opiniones solían tener el mismo peso y cuya opinión podía llevar incluso al cambio de capitán.
Así, y en ciertos aspectos la piratería tiene un punto de primigenia experiencia utópica de convivencia en que hombres que generalmente no tenían nada que perder compartían destino por haberse situado fuera de la ley compartiendo también botín y decisiones de una manera sorprendentemente igualitaria para nuestros días llegando incluso a guardar partes de botín para familiares de compañeros muertos, partes que fueron entregadas bastante años después del acaecimiento de la muerte.
Muy interesante... más por lo que se cuenta, por lo que sugiere un libro que termina siendo demasiado largo.
Publicado en 1724 por el escritos Daniel Defoe bajo el seudónimo Capitán Charles Johnson, esta "Historia general de los robos y asesinatos de los más famosos piratas" es un libro de libros.
Y lo es en un doble sentido.
Por un lado, es la fuente inicial que produjo el imaginario que posteriores escritores utilizaron para construir sus historias de ficción sobre piratería y por otro, y teniendo en cuenta su carácter "serio" de crónica, los hechos en mayor o menor medida verídicos que se narran encierran la posibilidad de cientos de historias de piratas (ya escritas o por escribir) hasta el punto de que uno tiene la sensación de que en cada párrafo brilla la posibilidad de un relato o una novela.
Y es este punto, a mi entender, una característica ambivalente del libro de Deföe ya que la sucesión de historias y el ajustado relato de los hechos que en ella se cuentan termina por resultar agotador para el lector.
Lo descriptivo, casi burocrático, prima sobre lo literario hasta el punto de que el libro se disfruta más en su comienzo que en su final.
Dividido en dos partes, la primera de las cuales ya aborda la historia de diecisiete distintos piratas, las historias terminan por resultar demasiado parecidas y familiares contribuyendo al distanciamiento por parte del lector el estilo frío y preciso, adecuado al informe que el libro pretende ser... si lo que uno busca es imaginación y literatura.
No obstante, esta crónica de piratas es un libro de lectura absoluta recomendable para conocer la realidad de este mundo que tan propenso ha sido para generar historias en su seno.
Algunas historias, como la del pirata francés Misson, consiguen traspasar la formal frontera del informe para ser una auténtica aventura por sí misma que se disfruta palabra a palabra desde la Francia prerevolucionaria hasta la isla de Madagascar.
En definitiva, esta historia de Deföe proporciona al lector material para soñar desde un acercamiento que se pretende fidedigno y que convierte al autor en un notario más que en un escritor. Y si lo que se busca es acercarse al fenómeno desde el punto de vista histórico -que es la razón de ser del libro- es el libro perfecto e imprescindible para comprender la realidad del pirata y la piratería.
Un fenómeno sorprendentemente circunscrito a un corto periodo de tiempo, el primer cuarto del siglo XVIII y en cuyo origen está las posibilidades que el mar, frontera todavía por conquistar por el poder de los estados, ofrecía a los desheredados para escapar a su mísera condición. Llama especialmente la atención de la existencia de piratas crueles y asesinos, pero también de piratas buenos, como Misson, hombres fuera de la ley pero que mantenían una relación bastante civilizada con la violencia... en ocasiones mucho más civilizadas que sus legitimados por al ley perseguidores.
Además, la piratería presenta otra cualidad interesante y relativamente desconocida y es su carácter de experimento democrático entre aquellos que se consideraban iguales en la desgracia. Entre otras cosas, en todo barco pirata el poder del capitán era contrabalanceado por una especie de tribuno de la plebe, generalmente un hombre mayor y con experiencia, cuyas opiniones solían tener el mismo peso y cuya opinión podía llevar incluso al cambio de capitán.
Así, y en ciertos aspectos la piratería tiene un punto de primigenia experiencia utópica de convivencia en que hombres que generalmente no tenían nada que perder compartían destino por haberse situado fuera de la ley compartiendo también botín y decisiones de una manera sorprendentemente igualitaria para nuestros días llegando incluso a guardar partes de botín para familiares de compañeros muertos, partes que fueron entregadas bastante años después del acaecimiento de la muerte.
Muy interesante... más por lo que se cuenta, por lo que sugiere un libro que termina siendo demasiado largo.