

Aquí posan todos en una foto tomada al día siguiente.
Siempre me emociono viendo "Toro salvaje", llevo casí veinte años haciéndolo y ayer también me emocioné espiando a La Motta persiguiendo a su hermano Joey para abrazarle y pedirle perdón.
"Toro salvaje" es una película sobre el boxeo... mejor expresado, "Toro salvaje" cuenta a lo largo de sus casi dos horas de metraje el combate que Jake La Motta libra contra si mismo por entenderse, llegar a un cierto acuerdo y alcanzar la paz.
Para mi gusto, esa escena, la de la persecución del hermano, es la culminante de la película. La Motta por fin está en condiciones de acercarse y pedir perdón por todos sus errores cometidos. Mucho más culminante que la oscura escena de soledad en la cárcel donde La Motta se reprocha brutalmente su propio ser y, como directa e inevitable consecuencia, todo su estar en el mundo. Escena que, aún siendo importante, necesita -a mi entender- el complemento de la plasmación real de esa culpabilidad asumida en una disculpa.
La Motta está en paz consigo mismo y por éso el espectador -al final- simpatiza con un personaje que, a lo largo, de la historia ha mostrado con ostentación brutal un comportamiento terrible y enloquecido cuya recompensa es el alejamiento progresivo de todos aquellos que le quieren.
"Toro salvaje" cuenta la historia del ascenso y la caída del boxeador italo-americano Jake La Motta, pero también nos muestra el surgimiento de La Motta de entre el marasmo de sus propias cenizas ("las caídas hondas de los cristos del alma" de la que habla César Vallejo) para ser un hombre nuevo... Aparentemente un fracasado, pero en realidad un absoluto triunfador porque la victoria sobre uno mismo es siempre la más difícil de todas.
Después de todo, todo el sistema de capitalismo consumista en que vivimos se sustenta sobre esa constante derrota que nos hace ceder y seguir deseando lo que en realida dno necesitamos... pero esa es otra historia.
"I remember those cheers
They still ring in my ears
And for years they'll remain in my thoughts
Cuz one night I took off my robe
And what'd I do
I forgot to wear shorts.
I recall every fall, every hook, every jab
The worst way a guy could get rid of his flab
As you know, my life was a jab...
Though I'd rather hear you cheer
When I delve into Shakespeare
"A Horse, a Horse, my Kingdom for a Horse,
"I haven't had a winner in six months
(he lights his cigar)...
I know I'm no Olivier
But if he fought Sugar Ray
He would say
That the thing ain't the ring
It's the play.
So gimme a stage
Where this bull here can rage
And though I can fight
I'd much rather recite
That's entertainment!
That's entertainment."
Uno detrás de otro, La Motta derrotaba a sus rivales en el cuadrilatero sin comprender que su principal y más peligroso rival era él mismo.
Ninguna de aquellas victorias sirvió de mucho al no haber obtenido la más importante de todas.
Mucho se ha dicho y escrito sobre esta tremenda película dirigida por ese también tremendo director llamado Nicholas Ray, pero -y por encima de todo- "Johnny Guitar" es para quién ahora escribe una película sobre ese extraño mecanismo humano llamado deseo y los efectos que su maquinaria causa sobre las personas que no pueden evitar sentirlo porque les hace ser lo que son.
Vienna (Joan Crawford) desearía no amar a Johnny Guitar, pero se conforma con desear que haya cambiado mientras no puede evitar llamarle, mientras desea que la ruleta de su local siga girando a la espera del ferrocarril.
Johnny Guitar (Sterling Heyden) desearía haber olvidado a Vienna en los ojos de otras mujeres, pero se conforma con volver a ella deseando poder volver a quererla como siempre la quiso. Mientras también quisiera ser un otro diferente a Johnny Logan, el pistolero que es.
Dancing Kidd (Scott Brady) desea encontrar oro y también desea que Vienna le desee mientras quisiera que Johnny Guitar jamás hubier apuesto los pies en su salón.
Emma Small (Mercedes McCambridge) desea a Kidd y, llena de loco y brutal odio, desea que Vienna, su competidora por el corazón de Kidd, desaparezca.
Practicamente todos los personajes de "Johnny Guitar" persiguen la alargada sombra de un objeto de deseo que siempre se les escapa. Constantemente se estrellan contra un invisible cristal que les separa de la plenitud de un buscado encuentro.
Ninguno tiene lo que busca y persiguiéndolo todos se cruzan en una telaraña de caminos entrelazados que en su conjunto compone un brillante drama lleno de melancólica poesía.
En "Johnny Guitar" todos los personajes aparecen teñidos de una evidente melancolía, como si supieran por sentido común y experiencia que el fracaso fuera ser con toda probabilidad la única recompensa a obtener. Pero, y aún así, en todos ellos late la loca obstinación autodestructiva por perseverar en el error de perseguir lo imposible. Una obstinación que incluso les lleva, como en el caso de Emma (probablemente el personaje que más ama en la película) al más desenfrenado y loco de los odios en un evidente -en mi opinión- caso de extremos que se tocan.
De esta materia esta compuesto el propio laberinto en el que todos y cada uno de los personajes viven encerrados, un laberinto del que el pequeño valle en que sucede la historia (y del que fisicamente no se podrá escapar conforme las obras del ferrocarril avance) se convierte en metafórico trasunto.
En mi mirada "Johnny Guitar" es un manjar que siempre se deshace en una locura de sabores amargos y dulces:
- El hombre concebido como una contradictoria fragilidad capaz de desear ferreamente lo imposible.
- El suicidio emocional (cuando no físico) en que a veces se convierte ese férreo deseo de lo imposible.
- Y el misterio del éxito encarnado en el beso final de los amantes existiendo con la insinuación d etoda su promesa para tentarnos a seguir jugando en la ruleta rusa del deseo mientras nos queden latidos en el corázón.
Esta película rodada en 1946 por el europeo, experto en B-Movies, Robert Siodmak es uno de los títulos emblemáticos del Cine Negro hollywoodiense.
Basada en un relato corto de Ernest Hemingway, "Forajidos" es una historia compleja, narrada mediante once flashbacks y que cuenta con la rareza de que su protagonista muera tiroteado al comienzo de la película.
Se encuentra en el punto de intersección de dos universos: el del escritor norteamericano, pamplonica y parisino de adopción, (protagonistas complejos, nihilistas y atormentados por esa misma complejidad, mujeres fascinantes que con su belleza hacen saltar por los aires la poca cordura que aquellos les restaba, desesperado romanticismo) y el del propio cine negro (atracos perfectos, personajes en continuo tráfico de ida y vuelta por la frontera que separa el bien del mal, mujeres fatales, deseperado materialismo...) .
Al principio de la película dos pistoleros se presentan en un pequeño pueblo dispuestos a matar al empleado de la gasolinera, Ole Andersen, "El sueco" (Burt Lancaster) y lo consiguen.
La investigación llevada a cabo por un eficiente inspector de seguros (interpretado por Edmond O'Brien con su brio habitual) como consecuencia de un seguro de vida dejado por Andersen conducirá la historia por una compleja trama de flashbacks en busca del pasado. En ella, y por boca de diversos personajes en algún momento relacionados con Andersen, iremos conociendo la trágica historia de su fracaso y de su condición de victima tanto del malvado y manipulador Colfax (Albert Deeker) como de la hermosa y fatal Kitty Collins (Ava Gardner).
Como artefacto narrativo, "Forajidos" es un complejo mecanismo que funciona a la perfección y que en sus escasos 80 minutos de duración interesa y fascina.
Todo un referente para los fanáticos del cine negro.
"mi padre está desconocido, frágil,Es curioso.
mi padre es una víspera.
Lleva, trae, abstraído, reliquias, cosas,
recuerdos, sugerencias.
La mañana apacible le acompaña
con sus alas blancas de hermana de la caridad"
(Enereida, fragmento perteneciente al libro Los heraldos Negros. Cesar Vallejo)
"Las piedras no ofenden: nada
codician. Tan sólo piden
amor a todos, y piden
amor aún a la Nada.
Y si alguna de ellas se
van cabizbajas, o van
avergonzadas, es que
algo de humano harán..."
(Truenos, fragmento perteneciente al libro Los heraldos Negros. Cesar Vallejo)
"Cuando la opción es llegar virgen al matrimonio o morir, creo que la postura de
la Iglesia Católica es insostenible: ante la epidemia de SIDA, entre la muerte y
el sexo, prefieren la muerte. Especialmente, teniendo en cuenta que la
proporción de habitantes que no tiene relaciones sexuales antes del matrimonio y
las tiene luego sólo con su cónyuge sólo cuando quiere tener hijos, es
insignificante en Kenia o en cualquier parte del mundo."
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De existir, seguro que Dios no querría éso.
No permitiría el genocidio, la elección entre cambiar o la muerte... aunque, y a lo largo de la historia, se han cometido muchos crímenes en nombre de los dioses, todavía vivos y ya muertos.
Los dioses... Probablemente, y junto a la Certeza, una de las mejores coartadas para la consecución de todo tipo de crímenes.
Los dioses... Otra voz más sonando en la cabeza de los locos y también de los cuerdos.
"No se engañe nadie, no,
pensando que ha de durar
lo que espera,
más que duró lo que vio
porque todo ha de pasar
por tal manera."(Coplas por la muerte de su padre, Jorge Manrique)
"La niebla envuelve el bosque frente a nosotros y el mar a nuestras espaldas. Al mismo tiempo, el lejano pico del Monte Tosa se ve tan claramente como un cielo de primavera. Delante, los francotiradores se ocultan entre los árboles y las sombras. Detrás, los asesinos se sumergen y se acercan, aferrados a maderos que arrastra la deriva.
¿De qué sirve la claridad en la lejanía?"(El honor del samurai, Takashi Matsuoka)
"La economía española crece desde hace una década a un ritmo claramente superior al de la media de la Unión Europea, pero este prolongado ciclo expansivo no se ha traducido en una paralela reducción de la brecha social. Mientras los beneficios empresariales se multiplicaban -el 73% entre 1999 y 2006-, el salario medio real de los españoles perdió el 4% de su poder adquisitivo en la década que va desde 1995 a 2005, según un informe de la OCDE difundido esta semana en París."
(El País)
No me extraña que Adolf y sus secuaces se anexionaran Austria en el 38.
Ésta es una papeleta perteneciente al referendum por el Anschluss, la anexión de Austria por parte de Alemania. Hacia la unidad por el circulo gordo. No hay pérdida... la de la propia vida, quizá... si uno se equivoca de círculo.
Con "El séptimo sello" (1957), Ingmar Bergman confirma el éxito internacional que obtuvo en el año 54 con "Sonrisas de una noche de verano". Ese mismo año firmaría otra de sus grandes obras maestras... "Fresas salvajes".
Inspirada, según confesión del propio autor, en las pinturas medievales, "El séptimo sello" es una película muy en la honda del pensamiento existencialista que de la mano del francés Sartre cuestionaba los felices inicios de la abundancia de la sociedad de consumo
El hombre, Dios como interrogante nunca cerrado y la absoluta certeza de la muerte para descompensar la balanza de una presunta cordura.
El hombre a solas con ese silencio que decide llamar Dios, abandonado a si mismo y a sus dudas y temores.
Regresado de las cruzadas junto a su escudero Jöns, el caballero Antonius Block se enfrenta a su final en medio de una Suecia temerosa del Juicio Final y asolada por la peste
Mientras escapa de su propia cita con la Muerte, Bloch intenta encontrar alguna certeza a la que agarrarse antes de marchar. Pero su profundo y desesperado dudar se materializa en preguntas que nadie puede contestar, ni siquiera la propia Muerte que se muestra como un mero agente de un proceso ciego y automático.
Muerte: ¿Dejarás alguna vez de hacer preguntas?
Antonius Block: No. Nunca.
Muerte: Pero sigues sin obtener respuestas.
Preguntas sin respuesta.
Continuamente y aunque sólo sea para llenar ese silencio desolador que se extiende como un desierto entre su preguntar y la nada que cada vez está más cerca.
Sólo silencio.
Un silencio denso, cási corpóreo.
Seguramente, y en sí mismo, una respuesta insatisfactoria.