La trampa del voto joven
España es un país demográficamente viejo, pero el PP ha decidido pelear la próxima batalla en el terreno más frágil: el voto joven de su bloque que hoy domina Vox. Este artículo explica por qué ese giro responde al miedo a un sorpasso inmediato, por qué es una apuesta estadísticamente mala en una sociedad envejecida y cómo puede acabar debilitando al PP mientras fortalece a Vox y consolida al PSOE en el centro del tablero. España es un país viejo. La edad media supera los 44 años. Más del 21 % de la población tiene más de 65. Y el votante adulto —entre 45 y 70 años— es, con diferencia, el que más participa, el que más se moviliza y el que más decide elecciones. Sin embargo, el Partido Popular ha reorientado una parte creciente de su estrategia hacia el voto joven , tratando de disputárselo a Vox. Esto no es una impresión ni un sesgo interpretativo: es un movimiento real, verificable y acelerado en los últimos dos años. Este artículo explica por qué el PP e...