Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como Filosofía

Pensar en la oscuridad: el CPS y el límite real de la razón humana

Imagen
El Complex Problem Solving ocupa un territorio extraño entre el saber y el no saber: demasiado inestable para sostener la promesa ilustrada de previsión racional, pero demasiado estructurado para ser simple intuición. Este artículo explica por qué el CPS convierte la razón en un arte de navegación, por qué sus modelos caducan al contacto con el mundo real y qué tipo de conocimiento —limitado pero operativo— puede ofrecer. CPS: razón en los bordes de la razón La tradición moderna construyó una idea muy precisa del conocimiento: saber era comprender el mundo de manera estable y repetible, de modo que ese saber pudiera convertirse en técnica, dominio y previsión. La Ilustración prometía que la razón podía iluminar cualquier territorio. Bastaba con suficiente método. Pero hay regiones del mundo donde esa promesa deja de funcionar. Sistemas que cambian mientras se los observa, interacciones que producen efectos inesperados, situaciones don...

La IA puede pensar más rápido que tú… pero nunca sabrá para qué

Imagen
Hace unos días, Sam Altman, director ejecutivo de OpenAI, lanzó una frase destinada a provocar titulares: «Un niño nacido en 2025 nunca será en ningún momento de su vida más inteligente que la inteligencia artificial» . La sentencia ha corrido por las redes como una profecía inevitable, y no faltan quienes la repiten con una mezcla de asombro y resignación: el ser humano habría llegado a su límite, y la máquina está a punto de superarlo. Pero tras el impacto inicial conviene hacer una pausa. No porque la frase sea exprese un imposible —de hecho, probablemente en unas décadas la inteligencia artificial superará en muchas tareas cognitivas a cualquier persona—, sino porque contiene una trampa conceptual que, si no la desenmascaramos, terminará por darnos una visión equivocada de la IA. Esa trampa consiste en reducir lo humano a “inteligencia”, como si fuéramos solo máquinas de procesar datos. Y no lo somos. El mito de la inteligencia como medida de lo humano Durante más de un siglo, e...

Cómo Kautsky convirtió a Marx en socialdemócrata

Imagen
  En la tradición marxista, el Estado nunca fue un asunto secundario ni una cuestión técnica de administración. Es el corazón del problema revolucionario. Para Marx, el Estado es la forma política de la dominación de clase: el aparato mediante el cual la burguesía organiza y perpetúa su poder. La pregunta decisiva, entonces, fue siempre la misma: ¿puede ese aparato ser conquistado y usado por la clase trabajadora, o debe ser destruido y reemplazado por otra forma política? La respuesta a esta cuestión dividió a todo el movimiento obrero internacional. Fue el motivo de la fractura entre marxistas y anarquistas en la Primera Internacional; marcó la frontera entre revolucionarios y reformistas en la Segunda; y se convirtió en la paradoja irresuelta del siglo XX: de un lado, la socialdemocracia confiada en el parlamento y el Estado burgués; del otro, el socialismo real que convirtió al Estado en un poder absoluto. En todos los casos, la pregunta sobre el Estado no fue un matiz, sino l...

Racismo y demografía: la ficción de la pureza cultural

Imagen
La demografía constituye lo que podríamos llamar una “estructura dura” de la historia. Frente a la plasticidad de las ideologías o la maleabilidad de la política, los datos de natalidad, mortalidad y envejecimiento imponen límites objetivos que ninguna voluntad puede ignorar. Emmanuel Todd ha insistido en que los sistemas familiares y demográficos condicionan incluso la evolución política de las sociedades modernas. Dicho de otra manera: no se puede legislar contra la curva de la pirámide poblacional. Este punto resulta esencial para comprender la paradoja contemporánea del racismo. Allí donde las sociedades envejecen y no producen suficientes nacimientos para sostener su población activa, la inmigración se convierte en un requisito estructural. No es una opción voluntaria, ni una concesión moral: es la consecuencia de una necesidad biológica y social. Como diría la biología, la naturaleza aborrece el vacío; y en lo social, ese vacío lo llenan los movimientos humanos. La necesidad mi...

Europa: arqueología de un continente inventado

Imagen
Cuando abrimos un atlas (si es que aún quedan) y vemos el mapa del mundo, todo parece tan natural: África, América, Asia, Oceanía, Europa. Sin embargo, basta con una mirada un poco más atenta para descubrir la paradoja: Europa no es un continente geológico . No existe ninguna separación natural entre Europa y Asia. Lo que solemos llamar Europa es, en realidad, una península occidental del inmenso continente asiático.  Para justificar su autonomía, la cartografía moderna fijó como frontera los Montes Urales. Pero aquí está el problema: los Urales no constituyen una barrera geográfica real , sino una convención cultural. No tienen nada comparable a lo que significa, por ejemplo, la cordillera del Himalaya para separar el subcontinente indio: allí sí existe un muro montañoso imponente, con picos que superan los 8.000 metros, que marca una discontinuidad geológica, climática y cultural. En cambio, los Urales son montañas modestas, de alturas similares o incluso menores a las del Sistem...