Israel gana la guerra y escribe la paz: anatomía de un acuerdo para someter
Durante semanas, titulares de todo el mundo han anunciado que la guerra en Gaza se acerca a su fin gracias a un “plan de paz en cuatro fases” negociado con mediación de Estados Unidos. Para algunos observadores, este anuncio representa un rayo de esperanza tras la devastación desatada desde el 7 de octubre de 2023. Pero para quien siga de cerca la historia del conflicto, resulta difícil no reconocer un patrón demasiado familiar: el mismo guion que Israel ha ejecutado durante décadas, en el que cada supuesto paso hacia la paz es, en realidad, una forma de consolidar su poder sin resolver las causas de fondo. Este nuevo plan no es una excepción. Más que un tratado de paz en sentido estricto, es el epílogo político de una campaña militar que ha cumplido —aunque no del todo— con sus objetivos estratégicos. Y como en ocasiones anteriores, durará exactamente lo que dure su utilidad para el vencedor. 1. Un “plan de paz” que no lo es Lo primero que llama la atención del llamado plan de paz...